El Partido Popular también se quedó solo en la petición de ilegalizar el PCTV

Los populares fundamentaron su rechazo a la propuesta votada por todos los grupos parlamentarios en una defensa cerrada del Pacto Antiterrorista. El PP asumió su soledad parlamentaria y vio cómo los socialistas y todos los grupos minoritarios rechazaban sus propuestas de reafirmar el Pacto Antiterrorista e instar al Ejecutivo a solicitar la ilegalización del Partido Comunista de las Tierras Vascas. Los socialistas habían presentado una enmienda a la primera de las resoluciones, pero no fue aceptada por el PP. «Hoy un Parlamento democrático que representa la soberanía nacional ha dado a ETA el título de interlocutor político», sentenció Mariano Rajoy al término del debate. «Deje usted de ser terrorista y nosotros no vamos a negociar ni a darle un precio político por ello», es el mensaje alternativo que lanzó a los etarras. «¿Qué ha ido mal en la lucha antiterrorista para que haya que cambiarla?», se preguntó durante su intervención Eduardo Zaplana. El portavoz popular dudó de la sinceridad de Zapatero al asegurar que «nunca ha habido mano tendida, no puede tender la mano quien quiere t-nerlas atadas». E hizo una defensa cerrada de la validez del Acuerdo por las Libertades y contra el Terrorismo como «instrumento de eficacia» en la lucha del Estado de Derecho contra ETA. «No entendemos el por qué y el para qué» se tiene que cambiar la política antiterrorista, afirmó. Zaplana exigió al Gobierno que cumpla la Ley de Partidos y pida la ilegalización del PCTV porque «es igual a ETA y es igual a Batasuna». «Cuando a los terroristas se les invita al diálogo y a la negociación, lo primero que piensan es que sus crímenes y asesinatos han merecido la pena», afirmó el representante del PP. Por ello, consideró un «gravísimo error» apelar al diálogo cuando ETA no ha dado ningún paso e incluso el domingo pusó cuatro bombas en el País Vasco. Reprochó a Zapatero que no haya condenado esos atentados hasta el el día de ayer. El grupo Popular se presentó en este debate como el único que, en estos momentos, se mantiene fiel al compromiso de «derrotar a ETA».