Mata a su marido en Oviedo y muere despeñada en un acantilado

Rosa Enma Cajete García, de 34 años, mató ayer de una puñalada a su marido, Eduardo García, de 36, en su domicilio de Oviedo, en el que convivían con sus dos hijos de 10 y 14 años de edad, y que en el momento de los hechos no se encontraban en el domicilio. Ella misma comunicó por teléfono con la policía para dar el aviso de la muerte de su esposo y, tras darse a la fuga, su cadáver fue localizado pocas horas después en el fondo de un acantilado en las proximidades del Cabo Peñas, por el que se había precipitado con el vehículo familiar. El arma utilizada en el crimen fue un cuchillo de cocina de hoja estrecha y de unos quince centímetros de longitud, que le introdujo en su totalidad por la espalda de un golpe certero y que pudo afectarle al corazón, por lo que la víctima se desangró, informaron a Efe fuentes de la investigación del caso. De fiesta el domingo Algunos vecinos señalaron que eran frecuentes las discusiones de la pareja, si bien otras fuentes aseguran que se trataba de un matrimonio bien avenido, versión que concuerda con la de quienes aseguran haberles visto este mismo domingo departiendo en varios locales públicos de la ciudad e incluso alternando en una discoteca sobre las cinco de la madrugada anterior al suceso. El fallecido era una persona bastante conocida en Oviedo, puesto que era presidente de la Cooperativa Radio Taxi Principado, la mayor organización del sector en la capital asturiana. Varios de sus compañeros del taxi afirman no tener el menor conocimiento de desavenencias entre los cónyuges. Como prueba de ello, hablan de la intención de la pareja de mudarse próximamente a una vivienda que habían comprado en la urbanización de La Fresneda, una prestigiosa zona residencial en las cercanías de Oviedo.