Entre el plan soberanista y la estrategia de pacificación

Juan José Ibarretxe planteó su discurso de investidura como si el País Vasco no hubiera votado el pasado 17 de abril: resucitó su propuesta soberanista, que fue el caballo de batalla de la pasada legislatura, con un envoltorio más pactista y menos beligerante, con cambios de forma mas no de fondo. Ofreció, entre otras propuestas, la constitución de una mesa de diálogo de partidos «sin exclusiones», una forma de abrir la puerta a que Batasuna se reincorpore al debate político pese a su ilegalización. Euskadi es una comunidad «libremente asociada al Estado español»; está formada por «Araba, Bizkaia, Guipúzcoa, Nafarroa (y los territorios franceses de) Lapurdi, Nafarroa Behera y Zuberoa»; el pueblo vasco «tiene derecho a decidir su futuro» mediante una consulta, que si es favorable a una secesión deberá ser pactada con el Estado; «Euskal Herria» es un pueblo con identidad propia en Europa. Estas ideas, contenidas en el denominado plan Ibarretxe que el Parlamento vasco hizo suyo el pasado 30 de diciembre con los votos de Batasuna, son, a juicio del candidato del PNV, «cuestiones básicas sobre las que es necesario negociar entre todos» para lograr un «acuerdo de normalización política» en el País Vasco. Se declaró dispuesto a «explorar una nueva fase de diálogo» sin «condicionamientos», pero en el bien entendido que tiene que haber un «profundo respeto» por las decisiones adoptadas por mayoría absoluta en la cámara de Vitoria; es decir, la propuesta de nuevo estatuto político, también conocido como plan Ibarretxe, que rechazaron las Cortes el pasado 1 de febrero. El socialista Patxi López reclamó los votos del Parlamento vasco para ser investido lendakari a fin de colaborar desde Euskadi con la estrategia de pacificación impulsada por José Luis Rodríguez Zapatero. El candidato del PSE defendió la creación de tres mesas de consenso sobre la pacificación, la reforma del Estatuto de Guernica y de diálogo social entre empresarios, sindicatos y Gobierno. López presentó su candidatura a la jefatura del Ejecutivo vasco «sin pactos y sin ataduras» con otras formaciones políticas para demostrar que existe «otra política posible» en Euskadi, distinta a la que ha practicado el nacionalismo durante un cuarto de siglo. Será, dijo, la política del «acuerdo entre vascos y con el conjunto de España». El candidato del PSE declaró que su aspiración es ser el lendakari de un Gobierno cuya prioridad sea la paz. «Es una oportunidad única para hacer realidad el sueño de la paz» JUAN JOSÉ IBARRETXE Candidato del PNV a lendakari