El contingente se unirá a los 540 soldados que hoy desarrollan misiones en aquel país
La Otan plantea que tropas españolas luchen contra el opio en Afganistán
Bono anuncia el envío de 500 militares de un batallón de la Brilat con base en Asturias
El batallón de quinientos militares que España enviará a Afganistán puede acabar asumiendo una misión mucho más peligrosa que la de velar por la seguridad en las elecciones al Parlamento de aquel país. El ministro de Defensa, José Bono, anunció ayer en el Congreso que la Otan plantea la posibilidad de que el Plan de Operaciones para la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) permita bombardear las plantaciones de opio en Afganistán. Actualmente, sólo el Ejército afgano puede luchar contra la droga. El titular de Defensa admitió que, de aprobarse la participación de las tropas en la lucha contra el narcotráfico, el riesgo que asumen los soldados españoles «se incrementará, y muy notablemente». Bono aseguró que, si se produce esa modificación, explicará la situación en el Congreso «para que sean conscientes de las condiciones en las que actuaríamos». El ministro no dijo que pediría permiso para asumir esa misión, pero sí que buscará la «conformidad» de la Cámara. «Es el asunto más novedoso y más grave de los que hemos hablado aquí», afirmó. Previamente, el diputado del PP Fernando López Amor había reclamado un compro-miso activo en la lucha contra el narcotráfico y los posibles pactos con los «señores de la guerra». El ministro compareció ante la Comisión de Defensa para anunciar el envío a Afganistán de un contingente de 500 militares pertenecientes al batallón de Infantería Ligera San Quintín, con sede en Siero (Asturias) y encuadrado en el Regimiento de Infantería Príncipe de la Brigada Aerotransportable. Al mando del batallón estará su actual responsable, el teniente coronel Julio Herrera. Estos quinientos militares se unirán a los 540 que hoy desarrollan misiones en aquel país. Tendrán la base en Herat y podrán desplegarse por la región Oeste, que comprende también las zonas de Farah, Badghis y Ghor. Tres meses en el escenario La duración de esta misión, que en principio será garantizar la seguridad para la celebración de las elecciones el 18 de septiembre, será de unos 90 días, dado que una vez celebrados los comicios comenzará el operativo de repliegue. El coste de la operación ascenderá a 26 millones de euros, aunque el ministro Bono indicó que, al estar el batallón español encuadrado en la Fuerza de Acción Rápida de la tan, pedirá que esta organización asuma parte del presupuesto. La salida de los soldados españoles hacia Afganistán comenzará el próximo seis de julio y el despliegue estará completado en torno a la segunda quincena de ese mes. El envío de las tropas contó con el respaldo de todos los grupos excepto el de Izquierda Unida. Bono anunció también que España enviará a Lituania otros 40 militares y cuatro aviones de la clase Mirage F-1 como consecuencia de la parti-cipación española en la misión de la Otan de vigilancia del espacio aéreo de las repúblicas bálticas de Estonia, Letonia y Lituania.