Fanáticos desafían al Islam comiendo cerdo y bebiendo alcohol
La Policía, que ha llegado incluso a advertir al Gobierno en informes confidenciales de la fuerte implantación de esta filosofía salafista en círculos radicales de Melilla, considera que Rabei Osman El Sayed Ahmed, Mohamed el egipcio , uno de los máximos responsable del 11-M, instruyó a los terroristas de los atentados de Madrid dentro de los principios del Takfir Waq Hijra. Los documentos de la Comisaría General de Información sobre este grupo son numerosos. Hablan de un colectivo «conectado con la organización terrorista de Ben Landen» y de que su característica principal es que ser «fanáticamente agresivo». Anatema y Exilio, según los informes policiales, se ha surtido de inmigrantes legales perfectamente integrados en las sociedades occidentales, hasta el punto de que para disimular su integrismo ante las fuerzas de Seguridad son capaces de comer cerdo o de beber alcohol, prácticas prohibidas en la religión islámica. En Tarragona son los Salafistas argelinos y marroquíes los que mayor peso tienen y la policía cree que alguno de estos activistas pudo tener relación con la denominada célula de Hamburgo que perpetró el 11-S. Los agentes señalan a otro grupo radical presente en España directamente como «coordinador» de la organización terrorista kurda Ansar Al Islam en Europa. Además, miembros de la organización Jammat Islamic Pakistan, se dedican a la captación de muyahidines para enviarlos a campos de entrenamiento de Asia.