Las reformas estatutarias centran la vuelta al trabajo del Gobierno Zapatero quiere incrementar en el nuevo curso político el gasto social

Las vacaciones del Gobierno concluyen esta semana y el próximo viernes el Gobierno celebrará su primer Consejo de Ministros tras el descanso estival. Sobre la mesa, dos temas prioritarios: la negociación presupuestaria y las reformas de los estatutos. Dos asuntos que, pese a los esfuerzos gubernamentales por desvincularlos, están encadenados por Cataluña ya que un fracaso en la modificación estatutaria de esa comunidad pondría en peligro las alianzas presupuestarias en el Congreso. La primera piedra de toque para José Luis Rodríguez Zapatero llegará el 10 se septiembre con la segunda Conferencia de Presidentes, una cita que el jefe del Ejecutivo desea centrar en la reforma de la financiación sanitaria, pero que los gobernantes autonómicos, sin despreciar la propuesta gubernamental, pretenden ampliar al modelo territorial y la unidad nacional. Una aspiración en la que los gobernantes del PP, que han hecho de este debate su principal caballo de batalla, no estarán solos pues influyentes barones socialistas, como el extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ya han adelantado que en esa reunión quieren «hablar de España». El presidente del Gobierno también dará hora en los primeros días del nuevo curso político al lehendakari Juan José Ibarretxe, al que recibirá en la tradicional entrevista tras la elección de todo presidente autonómico -el jefe del Ejecutivo vasco logró la investidura el 23 de junio pasado-, y en la que Rodríguez Zapatero, según sus colaboradores, instará de nuevo a su interlocutor a que busque el entendimiento con los socialistas en la reforma del Estatuto de Euskadi y respalde los esfuerzos por alcanzar el final de ETA. Relación con el PP Otro de los primeros visitantes de la Moncloa, según fuentes gubernamentales, será el jefe de la oposición, Mariano Rajoy. El presidente del Gobierno no se ha reunido con el líder del PP desde el 14 de enero pasado y desde entonces sus relaciones no han hecho más que deteriorarse. Zapatero quiere comprobar si el principal partido de la oposición mantiene la estrategia de volar todos los puentes de entendimiento con el Ejecutivo o, por el contrario, ha dado un giro a sus planteamientos y es posible explorar puntos de encuentro en las reformas de los Estatutos y la Constitución. Septiembre será también el mes en que se despejará una de las principales incógnitas políticas: la reforma del Estatuto de Cataluña. De su aprobación, señalaron las fuentes consultadas, dependerá en buena medida la estabilidad parlamentaria del Gobierno de los socialistas. José Luis Rodríguez Zapatero dará un impulso a las medidas sociales en el nuevo curso político. A su regreso de vacaciones, tras concluir un año marcado por la ampliación de los derechos civiles y por haber dado la vuelta a algunas de las decisiones más polémicas del anterior gabinete, el presidente del Gobierno aumentará el gasto social, introducirá reformas de modernización de la economía y tratará de despejar la confusión generada por las modificaciones territoriales. Ahora, una vez comprobado que la bonanza económica no sólo persiste, sino que mejora, el jefe del Ejecutivo quiere mantener el crecimiento, pero también redistribuir esa riqueza, es decir, impulsar un segundo bloque de medidas sociales, más ambicioso que el del curso ya concluido. En la etapa que ahora comienza habrá mayores incrementos del salario mínimo interprofesional, de las pensiones mínimas, más becas y dotaciones para Vivienda y Sanidad. Además, desde principios de septiembre el Gobierno tratará de sellar un acuerdo entre sindicatos y patronal que permita aumentar la calidad del trabajo tanto en los empleos fijos como en los temporales. En este apartado habrá dos proyectos estrella: la ley de autonomía personal y la de igualdad.