La Generalitat admite que su financiación está «en el límite» de la Constitución

El Gobierno de la Generalitat reconoció ayer a través de los consejeros de Economía y Finanzas, el socialista Antoni Castells, y Comercio, Turismo y Consumo, el republicano Josep Huguet, que su propuesta de financiación autonómica está «en el límite de las posibilidades que ofrecía el texto constitucional», razón por la que «hay ciertamente el riesgo de que alguien opine que, por algunos centímetros, se ha traspasado el límite». Castells sostuvo, sin embargo, que la propuesta del tripartito es «la más viable desde el punto de vista de negociación con el Congreso», y «todos dicen que es una propuesta potente, excepto CiU», que reivindica un modelo de financiación basado en los denominados derechos históricos de Cataluña y semejante al Concierto Económico vasco. El consejero consideró, no obstante, que «hay un denominador común muy amplio y muy ambicioso» entre los modelos de CiU y el de la Generalitat porque ambos «comparten lo esencial». Por todo ello, reiteró que el Gobierno del tripartito presentó la propuesta de financiación «con la convicción de que se estaban extrayendo las máximas posibilidades que ofrecía» la Carta Magna, pero no quiso pronunciarse sobre la filtración del dictamen del Consejo Consultivo de la Generalitat que apreció aspectos inconstitucionales tanto en los modelos del tripartito como en el de CiU. Castells quitó importancia al dictamen porque «no es decisorio», y, a la vez, pidió «respeto» a esta institución autonómica. Pacto para ir más allá Por su parte, el Huguet defendió la necesidad de que el Gobierno catalán y CiU lleguen a un «pacto político» en materia estatutaria y de financiación que podría «perfectamente quedar en algún tema por debajo de lo que sería constitucional y en algún tema podría ir un poco más allá». A su juicio, hay que evitar que las Cortes Generales «recorten» el texto estatutario y «ver si se está pisando línea continua o discontinua». El consejero recordó que ERC siempre ha defendido «como ideal» y «horizonte posible» el modelo de financiación del País Vasco, pero descartó que esta fórmula sea posible en estos momentos en Cataluña, y aseguró que «nunca ninguna fuerza en Cataluña, ni ERC, ha planteado desentenderse de la cuota solidaria» con el resto de España.