Sospechan que el ciclista de Madrid fue atropellado y quemado

La Guardia Civil descubrió el pasado domingo el cadáver calcinado de un hombre en el paraje denominado Rascambres, en la localidad de El Molar (Madrid). Junto al cuerpo había restos calcinados de un maillot y material deportivo roto. Ayer, los especialistas del Departamento de Identificación de la Dirección General de la Guardia Civil confirmaron mediante el análisis de sus huellas dactilares que se trata de Francisco Quintana Calvo, el ciclista de Tres Cantos que desapareció el pasado jueves. Francisco Quintana Calvo, informático de 38 años de edad, salió de su casa el pasado jueves, día 15, con su bicicleta de montaña en dirección al Soto de Viñuelas, una zona residencial del municipio de Tres Cantos, para hacer algo de ejercicio. Cuando la familia vio que no volvía y ya era cerca de media noche, avisó a la Policía Local que, junto a la Guardia Civil, le buscaron toda la noche. Los trabajos de búsqueda continuaron al día siguiente. Más de 150 personas entre agentes del instituto armado, Bomberos de la Comunidad, efectivos del SUMMA, Protección Civil, Cruz Roja, Policía Local de Tres Cantos y voluntarios rastrearon durante el fin de semana los principales caminos de Soto de Viñuelas. En la tarde del domingo, un grupo de este dispositivo que peinaba la zona de Rascambre, en el Molar, cerca de la carretera A-1, encontró el cadáver calcinado de un varón. El cuerpo no tenía ningún documento que pudiera identificarlo, pero cerca de él se encontraron restos de un maillot quemado y material deportivo roto. Los agentes que lo inspeccionaron descubrieron que el hombre tenía un fuerte impacto en una cadera y en la zona abdominal. Análisis dactilar La Guardia Civil informó entonces a la familia de que había muchas probabilidades de que el cadáver encontrado fuera el de Francisco Quintana Calvo, aunque por el estado en el que se encontraba no pudieran reconocerlo. En la tarde de ayer, especialistas del Departamento de Identificación de la Dirección General de la Guardia Civil, mediante análisis de la huella del dedo índice del fallecido, lo confirmaron. Hasta aquí lo que se conoce con seguridad. Lo que en realidad sucedió desde que el ciclista salió de su casa vestido con su maillot para hacerse unos cuantos kilómetros hasta que se encontró su cuerpo el domingo por la tarde son meras especulaciones. La Guardia Civil sospecha que un coche pudo atropellarlo y, después, sus ocupantes haberlo trasladado hasta un descampado y quemarlo. Otro ciclista desaparecido Mientras, Nieves Mata, la madre del ciclista que desapareció hace una semana en A Coruña, aseguró ayer que no pierde la esperanza de encontrar a su hijo, al señalar que en las últimas horas se han intensificado las labores de búsqueda. Jorge Eiriz, que es director de una entidad bancaria de A Coruña, desapareció el pasado miércoles después de salir a pasear en bicicleta, sin su teléfono móvil, sin documentación y sin dinero, y desde entonces no saben nada de su paradero. La familia cree que el joven, de 33 años, podría estar sufriendo un «cuadro de amnesia» que le impida orientarse.