Zapatero pide a CiU que rebaje sus exigencias para sacar el Estatut adelante

José Luis Rodríguez Zapatero trató de granjearse el apoyo de CiU al Estatut en la «discreta» entrevista que el pasado lunes mantuvo en el Palacio de La Moncloa con Artur Mas. El jefe del Ejecutivo instó al líder de los nacionalistas catalanes a hacer concesiones en sus reivindicaciones en aras del consenso y le advirtió que no puede pedir para Cataluña un concierto económico como el del País Vasco porque sería «inconstitucional». No obstante, el Gobierno abrió la puerta a una posible una vía intermedia, aunque con un sistema distinto al de los territorios forales. El Ejecutivo central negó ayer que su presidente actúe como intermediario en la recta final de la reforma estatutaria, pese a reconocer que en los últimos días se ha reunido o ha conversado por teléfono con la mayoría de los dirigentes políticos catalanes. Fuentes gubernamentales indicaron que Rodríguez Zapatero ha mantenido contactos con Pasqual Maragall, con quien conversa con frecuencia, con Josep Lluis Carod-Rovira y con un destacado dirigente del PP nacional. Unos encuentros que, según el gabinete socialista, no han sido secretos, sino «discretos», por petición expresa de sus interlocutores. El Gobierno hace equilibrios para tratar de interferir lo menos posible en el debate en el que desde hace casi dos años se ha sumido la clase política catalana y al mismo tiempo intenta lanzar mensajes tranquilizadores que dejen constancia de que un estatuto inconstitucional no prosperará en el Congreso de los Diputados. Imprescindible apoyo CiU es la pieza clave que falta por encajar en el puzzle catalán. En el encuentro con Mas, Rodríguez Zapatero intentó encajar esa ficha y no salió de la entrevista descontento, según fuentes cercanas al presidente del Gobierno, que aprovechó la reunión solicitada por el propio dirigente nacionalista, para recordar a Mas la importancia de que la reforma salga adelante, algo imposible sin el voto a favor de su formación en el pleno del próximo viernes. Rodríguez Zapatero advirtió al presidente de CiU que su formación forzará el fracaso del proyecto si se empeña en demandar un régimen económico similar al del País Vasco y Navarra y por ello le instó a ceder como hasta ahora considera que ha hecho el resto de partidos políticos.