El artefacto era muy similar a los que estallaron en Madrid en febrero

Los primeros informes de los artificieros indican que el artefacto que estalló sobre las 22.01 horas del pasado sábado, sin causar víctimas, pero con importantes daños materiales, podría estar compuesto por entre 15 y 20 kilos de cloratita, una sustancia explosiva de fabricación casera. El coche bomba fue elaborado con la misma sustancia y una carga explosiva casi idéntica que los que ETA hizo estallar este año en las cercanías del recinto ferial de Madrid (el 9 de febrero), en el barrio madrileño de San Blas (25 de mayo) y junto al estadio de La Peineta. Las autoridades francesas están convencidas que ETA fue la autora, el 22 de abril pasado, del robo de 4.000 kilos de clorato potásico -el principal componente de la cloratita- ocurrido en una empresa química de Poitiers. Los cálculos Los interrogatorios a guardias de seguridad en el lugar de los hechos han permitido calcular que los terroristas pudieron aparcar la furgoneta bomba junto a la nave de Matchmind -una empresa de aplicaciones informáticas ubicada en el póligono- sobre las tres de la tarde, unas siete horas antes del estallido y seis horas y media antes de que los miembros del comando alertasen del atentado a Gara y a la DYA . El explosión del vehículo, que no levantó sospechas por estar perfectamente aparcado, causó importantes daños en tres naves y la onda expansiva esparció fragmentos de la furgoneta en un radio de unos 200 metros.