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El texto llega al Congreso y Carod anuncia referéndum si no prospera

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Gonzalo Bareño - redacción | madrid
León

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El secretario general de ERC, Josep Lluis Carod Rovira, advirtió ayer en Madrid de que si el Estatut se «desnaturaliza» en el Congreso los partidos catalanes que lo defienden convocarán un referéndum en Cataluña en el que pedirán el no para el texto que se apruebe en Madrid. Carod explicó que las fuerzas catalanas sólo admitirán «recortes mínimos» entre los que en ningún caso se incluiría la retirada del término «nación» del articulado. Carod apuntó también la posibilidad de que los partidos que lo promueven retiren el texto del Parlamento antes de que sea votado si se intenta recortar su contenido. El líder de ERC no descartó tampoco que el fracaso del Estatut provoque un adelanto de las elecciones en Cataluña. El líder independentusta lanzó también un aviso al PSC. Advirtió de que si uno de los partidos que apoya el Estatuto «desfigura» el texto en Madrid «entenderíamos que voluntariamente han roto el acuerdo y recuperaríamos la libertad de movimiento». Carod hizo estas declaraciones el mismo día que el presidente del Parlamento catalán, Ernest Benach, entregó el texto del Estatut a su homólogo en el Congreso, Manuel Marín. Tanto Carod como Benach inisistieron en que el estatuto catalán se presenta como una «mano tendida a los pueblos de España». No obstante, Carod advirtió de las graves consecuencias que, a su juicio, tendría un rechazo en Madrid al Estatut aprobado en Cataluña con un apoyo del 90% del Parlament. «Sería un fracaso de la confianza de Cataluña en las posibilidades reales de la voluntad de entendimiento, de acuerdo y de respeto por parte de España», dijo. Añadió que ese fracaso dificultará también la posibilidad de encontrar un modelo de convivencia en España «en el que quepa Cataluña». Durante su intervención, Carod Rovira afirmó que en España existe «una especie de catalanofobia, mientras que en Cataluña no existe una españofobia porque no vamos contra nadie». Menos exigente se mostró en principio Benach, también de ERC. «Venimos a dialogar y pactar. Hay que sentarse en la mesa, con papel y lápiz u ordenador, y trabajar y trabajar», explicó en una rueda de prensa en el Congreso. El presidente de la Cámara catalana aseguró que el Estatut «no va contra nadie, ni quiere romper nada, ni es una puerta a la independencia». También el presidente de CiU, Artur Mas, se trasladó ayer a Madrid para reclamar que en el resto de España se trate el estatuto catalán «con serenidad y tranquilidad». Más aseguró que CiU defenderá el texto en el Congreso «con todas sus consecuencias» e insistió en que la reforma no es un «proyecto de ruptura», sino de «evolución de la relación entre Cataluña y el conjunto del Estado». El texto del Estatuto debe ser calificado por la mesa el 18 de octubre. Llegará al pleno el 2 de noviembre para ser tomado en consideración. Si es admitido, se abrirá un plazo de enmiendas que concluiría en una votación en abril del 2006. «En Cataluña no existe una españofobia porque no vamos contra nadie» JOSEP LLUIS CAROD-ROVIRA Secretario general de ERC

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