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ERC avisa al PSOEde que un pactobilateral con el PP haría peligrar la gobernabilidad El Gobierno asegura que Caruana no debe opinar sobre el proyecto

Publicado por
Magis Iglesias P. de las Heras - madrid madrid
León

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José Luis Rodríguez Zapatero pondría en peligro la estabilidad de su Gobierno si accede a un pacto bilateral con el PP sobre el estatuto catalán. Así se lo advirtió este martes el portavoz de Ezquerra Republicana de Cataluña (ERC), Joan Puigcercós, quien recordó que el PSOE no puede acordar unas leyes con sus «socios preferentes» y la reforma estatutaria con el primer partido de la oposición. Por parte del partido de Mariano Rajoy, la expectativa de un entendimiento con el Gobierno en este terreno se aleja cada día más porque los populares tienen muy claro que no entrarán en la negociación del articulado de la propuesta de reforma. «Nos va a resultar muy difícil participar en el maquillaje de la propuesta de estatuto», dijo el portavoz del grupo popular en el Congreso, Eduardo Zaplana. «No vamos a servir de coartada», añadió en la rueda de prensa posterior a la reunión de la Junta de Portavoces, donde explicó a los periodistas que el presidente del Gobierno intentará contar con el PP para «aparentar ante la opinión pública». «Nosotros no participaremos en el disimulo», insistió Zaplana quien utilizó un lenguaje críptico para ofrecer un cauce de acuerdo con el PSOE. «Si nos quiere encontrar ya sabe dónde estamos», comentó al tiempo que recordó que Mariano Rajoy ofreció a José Luis Rodríguez Zapatero, el pasado 14 de enero, un acuerdo sobre la Constitución los estatutos de autonomía y el modelo de financiación autonómica. Con éste y otros mensajes transmitidos en los últimos días, el PP invita al PSOE a una negociación bilateral para buscar una salida al estatuto catalán que aborde una reforma constitucional pero rechaza de plano cualquier otro tipo de compromiso de modificación parcial de la reforma. El Gobierno está molesto con el gobernador del Banco de España, Jaime Caruana. Su llamada de atención sobre la repercusión que podría tener en la economía el nuevo estatuto de Cataluña ha sentado mal en el gabinete de José Luis Rodríguez Zapatero, que le acusó hoy de haber generado una alarma innecesaria en la sociedad y, aún más, de inmiscuirse en lo que no le concierne. El ministro de Industria y primer secretario del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC), José Montilla, advirtió desde Luxemburgo que alguien que ocupa un cargo como el de Caruana «ha de estar por encima de las batallas políticas partidarias» y no debe tomar posición porque, de lo contrario, «corre el riesgo de que se cuestione su independencia e imparcialidad». El reproche del Gobierno -en el que coincidió también el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes- se sustenta en un argumento clave: que el nuevo estatuto catalán aún no existe y, por tanto, es prematuro verter opiniones sobre su contenido, salvo si uno es político. Tanto Montilla como Solbes recordaron que a la propuesta aprobada por el Parlamento catalán aún le queda un larga tramitación en el Congreso, lo que significa que entre el texto actual y el definitivo puede haber serias diferencias. El ministro de Economía aseguró, de hecho, que afirmaciones como las de Caruana son «ciencia-ficción». Solbes afirmó que no hay motivo alguno para temer que el estatuto dañe la economía o fragmente, como dijo Caruana, el sistema financiero «si las cosas se hacen bien». El único respaldo que logró ayer Caruana fue el del PP. Acebes rechazó que su cargo institucional le impida pronunciarse sobre un proyecto de ley, como sostiene el Gobierno, y afirmó que, más bien al contrario, cumplió con su obligación al dar la «voz de alarma» sobre las repercusiones que tendrá en la economía un texto «intervencionista». «Quien tiene que opinar y decidir son los depositarios de la soberanía nacional, que son las Cortes Generales» JOSÉ MONTILLA

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