Diario de León

«Me indigna que se juegue a la política?a costa de la vida humana»

Iospe Buades lleva temas de inmigración

Iospe Buades lleva temas de inmigración

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d.b. | dajla
León

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Fueron ellos los que dieron la voz de alarma. SOS Racismo, Elía, Women¿s Link y la Compañía de Jesús. Ellos contradijeron a todos los que, el sábado, creyeron que Marruecos solucionaría inmediatamente la crisis de los subsaharianos abandonados en el desierto. Ellos avisaron que un montón de autobuses se seguían dirigiendo al sur, que dejaban un desierto por otro desierto aún peor. Iospe Buades, mallorquín de 39 años, era el jesuita del grupo. -¿Por qué decidió viajar a Marruecos para denunciar las deportaciones? -En principio el objetivo del viaje era la comprobación sobre el terreno de las consecuencias que habían tenido las deportaciones en el desierto. Ver si había muertos y heridos, gente abandonada. Yo llevo los temas de emigración desde mi sede en Valencia y vinimos a apoyar a oenegés que trabajan sobre el terreno. Lo que pasa que el domingo nos empezaron a llamar los propios inmigrantes y a decirnos que los estaban llevando para el sur. Al principio nadie me creyó. Primero porque el día anterior parecía que todo se iba a resolver, y después porque la gente, incluido el Gobierno español, parecía dispuesta a creer en las buenas intenciones de las autoridades de Marruecos. -¿Cómo se siente después de lo que ha vivido en los últimos días? -Personalmente siento una indignación tremenda al ver cómo se juega a la política a costa de las vidas humanas. Siento piedad por los que sufren y también esperanza porque ha habido una movilización de personas para hacer frente a esta tragedia, porque ha entrado en juego una red de organizaciones que ha conseguido llamar la atención sobre lo que estaba pasando. Desde un punto de vista institucional, como jesuita, creo que es un imperativo de conciencia hacerse eco de situaciones como esta. Y como cristiano se me viene a la memoria la parábola del samaritano. La tentación de mirar hacia otro lado en situaciones como esta siempre existe. Pero cuando estamos ante alguien que sufre, estamos contemplando al Señor.

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