| Crónica | Dificultades con el suelo |
Se busca terreno para macrocárcel
Interior sólo tiene apalabrados los solares de siete de las once prisiones
«Hemos convencido a Solbes, que no era fácil, pero ahora viene el verdadero problema: encontrar ayuntamientos que nos dejen construir una cárcel en su municipio». Las palabras son de un alto responsable penitenciario este viernes, poco después de que el Consejo de Ministros aprobara el plan de construcción de centros. Con el dinero en la mano Interior comienza ahora la fase que todos los técnicos de infraestructuras penitenciarias temen: convencer a las instituciones de que una cárcel no genera más delincuencia en la zona donde se ubica y sí que crea puestos de trabajos directos, además de aportar infraestructuras a la comarca. Con estos problemas, Instituciones Penitenciarias sólo tiene apalabrada la ubicación de siete de las once cárceles. En los casos de los centros de Andalucía, Valencia, Fuerteventura y la segunda cárcel del País Vasco no han comenzado las conversaciones. Casi cerradas están las negociaciones para las cárceles de Navarra y Guipúzcoa, donde ya hay acuerdos con las instituciones que pasan por tirar los penales existentes. En Ceuta, la presidencia ha prometido interceder para construir en terrenos militares, a cambio de que se destruya la cárcel actual. En Menorca, el cabildo colabora activamente para conseguir un establecimiento que evite que los menorquines tengan que cumplir penas en centros de fuera de la isla. En Murcia se han iniciado los contractos con el gobierno regional, aunque todavía no hay ubicación. La nueva cárcel soriana está proyectada desde el denominado Plan Soria y los técnicos de prisiones creen que no habrá problemas para encontrar un terreno en esa vasta y despoblada provincia castellana.