El Rey está «orgulloso» de los españoles y asegura que seguirá «dando guerra»

El Rey Juan Carlos aseguró ayer, en el día en que se cumplen 30 años de su reinado, que está orgulloso de los españoles y que está dispuesto a seguir «dando guerra mientras el cuerpo aguante». El monarca celebrará este aniversario esta noche con una cena que ofrecerá la Casa Real. Desde Santa Cruz de Tenerife, en una breve conversación que mantuvo con los periodistas, aseguró que está dispuesto a seguir «dando guerra mientras el cuerpo aguante». Le preguntaron si eso serán otros 30 años y el monarca no pudo evitar sonreír. «No creo que dure tanto», afirmó entre risas. Ni el Rey ni la Reina Sofía sienten nostalgia del pasado. «Ahora estamos también muy bien», dijo doña Sofía. El monarca aseguró que los 30 años que han transcurrido ofrecen un balance «muy positivo» y garantizó que seguirá trabajando por España. Sobre todo, don Juan Carlos quiso destacar que está «muy orgulloso de los españoles» y de su comportamiento en este tiempo. «Quiero reiterar mi respeto, admiración y gratitud hacia el pueblo español, verdadero protagonista de las transformación y modernización logrados en España sobre la base del profundo espíritu de consenso y concordia que inspira nuestra constitución y contando siempre con el impulso integrador y moderador de la Corona», aseveró el monarca. Todo el poder en un rey Para Felipe González, ex presidente del Gobierno, el carácter constitucional de las decisiones que adoptó el Rey, antes de la aprobación de la propia Carta Magna, fue una de las claves de la Transición democrática «a pesar de que no haya sido estudiado o analizado» este aspecto. «Lo que menos se ha destacado, y es curioso, es que el Rey recibió todo el poder y, antes de que fuera un Rey constitucional, tuvo que nombrar él al presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, porque no había otro procedimiento para nombrarlo, pero fue en eso en lo que usó su poder absoluto», explicó. González dijo que «probablemente ni siquiera hubiéramos llegado a la Constitución» si el monarca hubiera dosificado el proceso y hubiera planteado utilizar todos sus poderes hasta la proclamación de la Carta Magna. El ex presidente socialista del Gobierno aseguró que no es una persona «especialmente monárquica». «Soy de los que creen que la gran fortuna de la monarquía española es que no hay muchos monárquicos que la defiendan, porque si hubiera 20.000 como (Luis María) Ansón, ya no habría democracia», ironizó. «Quiero reiterar mi respeto, admiración y gratitud hacia el pueblo español, verdadero protagonista de la transformación y modernización logradas en España sobre la base del profundo espíritu de consenso y concordia que inspira nuestra constitución y contando siempre con el impulso integrador y moderador de la Corona» JUAN CARLOS I Rey de España