Miles de seguidores y la cúpula del PP arroparon a su líder en un acto en defensa de la Constitución
Rajoy defiende una nación española única que no se puede fragmentar
Rechaza que se apele a derechos históricos con el fin de fomentar la desigualdad
El presidente del PP, Mariano Rajoy, aseguró ayer que en España solo hay una nación, «la española», y aclaró que el Estado autonómico no significa que «la nación se fragmente en parcelas». El jefe de la oposición realizó estas manifestaciones durante un discurso en un acto en favor de la Constitución organizado por los populares en la Puerta del Sol madrileña. Arropado por toda la cúpula de su partido y miles de seguidores -200.000 según la Comunidad de Madrid y 20.000 según otras fuentes-, se pudo comprobar el rostro más duro de un Rajoy que se fue calentando según avanzaba su intervención. Sus opiniones más contundentes fueron realizadas todas en referencia a las consecuencias que pueden tener la aprobación del Estatuto catalán, al que no nombró directamente en ningún momento de su intervención. «En Galicia, en Cataluña, en las Islas Canarias y en todas las comunidades: todos los españoles somos hombres y mujeres iguales en derecho. El Estado autonómico no significa que nuestra nación se fragmente en parcelas. No hay más que una nación, la española. No reconocemos más que un único poder soberano, cuyo propietario es el pueblo español entero», resaltó. Primera aparición pública En su primera reaparición pública tras el accidente del helicóptero que sufrió el pasado jueves, del que mostraba sus secuelas en un brazo escayolado, el líder conservador rechazó que se pueda «apelar a los derechos históricos para fomentar la desigualdad». «Estar censados en una comunidad autónoma no significa que dejemos de ser todos ciudadanos, todos españoles y todos iguales ante la Constitución», según destacó. También reconoció que las autonomías han favorecido un Estado «más justo y eficaz, con un mayor control y servicio al interés general». Inició su discurso, al que también asistió el ex presidente del Gobierno José María Aznar, recordando que la Carta Magna no fue «regalada, heredada ni impuesta», sino que fue fruto del acuerdo y, principalmente, de «la voluntad del pueblo español, dueño, autor y destinatario» de esa Ley fundamental. Para Rajoy, la Constitución ha permitido construir una España moderna, desterrando conceptos y actuaciones anteriores a la democracia. «Nosotros no vivimos mirando hacia atrás. No escarbamos en el pasado para dividir a los españoles», aseguró, al tiempo que subrayó que los populares no hablan «el lenguaje antiguo» de los hechos históricos, las soberanías medievales o «los pueblos irredentos». «Nosotros apostamos por los derechos individuales, porque concebimos a España no como una nación de naciones, sino como una nación de ciudadanos», precisó el líder popular. En esta misma línea, incidió en que la española no es una sociedad «cerrada y anquilosada», ya que lo que busca es incidir sobre su propio futuro y no acepta «un destino que venga determinado por otros». Y sentenció: «Nosotros decidimos nuestro propio futuro. No estamos sometidos al dictado de un tirano, de un partido totalitario o un credo nacionalista obligatorio». Y advirtió de que el futuro común no se construye con «radicalismos, intolerancia y mal talante». Reformas oportunas Eso sí, dejó claro que la Constitución se puede reformar, «con consenso, cuando sea oportuno», pero acusó, sin citarlos, a socialistas y nacionalistas de querer «imponer lo que no lograron en 1978» y de negar el pacto constitucional. Por ello, subrayó que se han roto todos los consensos, «incluidos los de la lucha contra el terrorismo o el modelo de Estado». El acto comenzó con la lectura por parte de un total de 19 militantes y concejales del PP, uno por cada comunidad y ciudad autónoma, de otros tantos artículos de la Constitución. Entre los asistentes estaban Ángel Acebes, Eduardo Zaplana, Esperanza Aguirre, y Ruiz-Gallardón. «En Galicia, en Cataluña, en las Islas Canarias y en todas las comunidades: todos los españoles somos hombres y mujeres iguales en derecho. El Estado autonómico no significa que nuestra nación se fragmente en parcelas» «No hay más que una nación, la española. No reconocemos más que un único poder soberano, cuyo propietario es el pueblo español entero» MARIANO RAJOY Presidente del PP