El Gobierno señala que el viaje «no es para vender material militar»
Bono vende ahora a Angola aviones militares de transporte
Serán los mismos modelos de aeronaves que las que se proporcionará a Venezuela
El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, anunció este miércoles en Angola que su colega de Defensa, José Bono, visitará «próximamente» este país africano para vender aviones militares de transporte que irían destinados a rehabilitar su maltrecha Fuerza Aérea. Se trata del modelo CN-295, uno de los prototipos que fabrica la empresa española CASA-EADS, el mismo modelo vendido a Venezuela, cuyo contrato fue firmado en Caracas el pasado 28 de noviembre por Bono y el presidente venezolano, Hugo Chávez. Moratinos explicó que su visita no es «para vender material militar», pero señaló que ambos gobiernos negocian «una posible venta de aviones C-295», que «puede tener interés» para las empresas españolas. Como ya hizo en el caso de Venezuela, el jefe de la diplomacia restó importancia política a esa operación y la enmarcó en un acuerdo «entre empresas privadas». Esta venta podría llevarse a cabo a pesar de que el Plan Director de Cooperación recomienda no vender material militar a países en desarrollo. No obstante, el ministro consideró que la venta «es compatible» con el plan porque Angola «necesita aviones» para usos civiles y eso «es bueno si es bueno para las empresas españolas». Puesta al día de su flota Angola, que vivió en permanente guerra civil desde su independencia de Portugal, en 1975, necesita esos aparatos para poner al día su flota aérea. En la actualidad, las Fuerzas Armadas de este país operan con aviones C-212, también de fabricación española, que fueron adquiridos durante la década de los ochenta y están ya muy anticuados. El Gobierno de Luanda compró entonces una decena de aeronaves de este tipo, de las que en la actualidad sólo dos o tres están en condiciones de vuelo. Moratinos hizo este anuncio tras reunirse en Luanda con su homólogo Joao Bernardo de Miranda. El acuerdo, de cerrarse, sería consecuencia de la ampliación al terreno de la defensa de la cooperación entre los países en materia de seguridad, según el acuerdo alcanzado en 2002. Esa asistencia comenzó en 1997 y gracias a ella policías y guardias civiles españoles forman también desde hace años a expertos angoleños para sus fuerzas de seguridad. La pesca fue otro asunto importante en esta visita. El canciller africano manifestó su «interés» en que haya un acuerdo bilateral entre ambos países para que los pescadores españoles puedan seguir faenando en los caladeros de este país mediante asociaciones y empresas de capital mixto. «El mensaje a los pescadores españoles es que van a poder seguir pescando en Angola», resaltó Moratinos.