Los fallecidos circulaban con dos compañeros en una motocicleta robada
Mueren dos niños arrollados por un tren cuando huían de la policía Detenida una mujer en Almería que mató a su marido y lo enterró en una fosa para los cerdos Capturadas 23 personas por tráfico de estupefacientes e incautadas más de 1.200 pastillas de éxt
Los menores saltaron la valla de separación de la vía a 50 kilómetros del paso a nivel
Dos niños, de 11 y 13 años, murieron a primera hora de la tarde del viernes al ser arrollados por un tren de cercanías, a dos kilómetros de la Estación de Murcia. Al parecer los fallecidos, que iban acompañados de otros dos niños, cruzaron cruzado las vías por una zona prohibida cuando pretendían alejarse de la policía. El incidente ocurrió a las 13.40 horas, en las proximidades de la Senda de Los Garres, en Murcia, en un lugar vallado que está situado a unos 50 metros del paso a nivel que regula el tráfico en la zona. Todo indica que los menores saltaron la valla de más de dos metros de altura y cruzaron las vías en el momento en el que se acercaba el tren de cercanías que cubre el trayecto Alicante-Murcia. El consejero de Obras Públicas, Joaquín Bascuñana, informó, tras consultar fuentes policiales, que al parecer «venían cuatro niños en una moto y han divisado, en el otro cruce, un coche de la policía local, entonces han optado por abandonar la moto y saltar la valla que protege las vías, de tal manera que dos han tenido mejor suerte y los otros dos han sido arrollados por el tren». El ciclomotor, un Daelim modelo Message, matrícula C8029BD, figuraba como sustraído, según informó el Ayuntamiento de Murcia Bascuñana cree que los menores consideraron «más rápido y fácil» dejar la moto y cruzar corriendo las vías «para no ser cogidos por la policía». El conductor de la locomotora no tuvo tiempo de reaccionar, porque los niños «aparecieron de repente». Sobre las 15.00 horas, el juez de guardia autorizó el levantamiento de los cadáveres, mientras en la zona se arremolinaban los familiares de los pequeños. La mujer de 47 años detenida en la localidad almeriense de Vélez Rubio como presunta autora de la muerte de su marido, Antonio Lóepz, de 50 años, tras una fuerte discusión, E.T.M., intentó suicidarse con una escopeta de caza mientras los agentes buscaban el cadáver de su esposo. La Guardia Civil informó en una nota de que recibieron el aviso de lo sucedido a las 17.30 horas del miércoles y fue la mujer la que llamó al 112 y dijo «que había matado a su marido y que los hechos habían ocurrido en un cortijo de su propiedad», conocido como Los Guiraos . Cuando los agentes se acercaron a la finca, la mujer les confirmó que había matado a su esposo «tras tener una fuerte discusión» y que para acabar con su vida había utilizado «una escopeta de caza», la misma que estaba en el lugar de los hechos. Además, dio a conocer que el cuerpo del hombre, Antonio López, «lo había sepultado en una fosa que es utilizada para enterrar a los animales que mueren en la granja». La Guardia Civil y la Policía Local de la localidad comenzaron a buscar por las inmediaciones de la vivienda, ubicada dentro de la explotación ganadera, el cuerpo del hombre y, una vez encontrada la fosa donde estaba el cadáver, la mujer expresó que «no quería aproximarse a la misma para no ver el cuerpo de su marido». Según la nota de la policía, la mujer se quedó apartada de los agentes y aprovechó para coger la escopeta de caza «que tenía oculta y disimulada en el tronco de un árbol» y «se disparó un tiro con la intención de suicidarse», pero el disparo no acabó con su vida sino que le impactó en la barbilla, según el instituto armado. La Guardia Civil, en colaboración con la Policía Municipal de Madrid, ha detenido a 23 personas que formaban una organización dedicada al tráfico de estupefacientes. La droga incautada, principalmente éxtasis y cocaína, se vendía en diferentes establecimientos y lugares de ocio de la Comunidad, así como en diversas discotecas de la ciudad de Madrid, según informó ayer el Instituto Armado. La operación Trasgu comenzó con la investigación de A.V.P., colombiano de 40 años de edad y D.M.C., español de 29, como principales encargados de la distribución de las sustancias estupefacientes. Tras meses de investigación, se consiguió identificar por completo al grupo de distribución de la droga a pequeño nivel. El 24 de noviembre los agentes arrestaron en Madrid a D.M., que se disponía a realizar una transacción de éxtasis.