Un ejemplo: Una iniciativa con 32 años de historia

San Nicolás de Bari surgió como talleres por iniciativa de Asprona León en 1974 en terrenos de Quintana de Raneros. De los talleres ocupacionales se pasó al centro especial en 1987. Su primer objetivo fue atender a las personas con discapacidad psíquica asistencialmente. Pero «desde sus orígenes el centro adquirió el firme compromiso de ofrecer una respuesta definitiva a las demandas de las personas con discapacidad no sólo en aspectos como la ocupación del tiempo libre o la atención directa a las personas con retraso mental», explica Juan Luis Cantón. La integración laboral pretende el acceso a las empresas ordinarias, pero «aún es muy difícil». No pasan de la docena las personas con discapacidad psíquica que han logrado integrarse en empresas ordinarias, por lo que el acceso al centro especial de empleo «después de demostrar la capacidad en el taller ocupacional» y los enclaves en empresas ordinarias son, hoy por hoy las vías que ofrecen más posibilidades.