Una difícil partida a cuatro bandas con distinta estrategia

En la negociación sobre el Estatuto hay al menos cuatro estrategias en función de los intereses de cada uno. ERC. Interpreta el papel mas dificil al tener que compatibilizar su alto nivel de exigencia al PSOE con su deseo de mantener la colaboración en Madrid y en Cataluña. Cuenta con la dificultad añadida de que CiU mantiene ahora des-de la oposición un discurso mas radicalmente nacionalista que el de la propia ERC. La estrategia de Carod pasa por implicar en la negociación a José Luis Rodríguez Zapatero para que una rebaja del Estatuto catalán no se interprete como una cesión de ERC ante el PSOE. Su interés principal es mejorar la financiación de Cataluña. CiU. El líder del partido, Artur Mas se encuentra cómodo en la actualidad. Quiere repetir en Madrid su éxito conseguido en Cataluña, en donde apareció como salvador del pacto e impulsor de las propuestas maximalistas de la reforma. CiU pondrá más énfasis que ERC en cuestiones simbólicas como el término nación, porque eso le dará votos en Cataluña. Puede permitirse el inmovilismo porque si el Estatuto catalán fracasa el presidente de la Generalitat, Pascual Maragall, deberá convocar elecciones en un momento de debilidad. PSOE. Sabe que, pese a su aparente dureza, los nacionalistas catalanes necesitan el acuerdo incluso más que el propio PSOE. Nunca tendrán una oportunidad como ésta y un posible fracaso perjudicaría mas a los catalanes, incluido el PSC, que al resto del PSOE. Las ofertas de financiación del PSOE son muy bajas porque saben que esa sera la clave y en donde deberán ceder al final. El PSOE está convencido de que sólo una importante mejora en la financiación para Cataluña permitirá el acuerdo entre las partes negociadoras. Pero la presión del resto de dirigentes socialistas impedirá que Cataluña tenga su propia agencia tributaria. José Luis Rodríguez Zapatero. El presidente del Gobierno quiere implicarse lo menos posible en esta fase de la negociación del Estatuto catalán y aparecer tan solo en la foto final del acuerdo entre las partes. Su estrategia pasa por el éxito final de un Estatuto que pueda ser aceptado en todos los puntos de España y que deje aislado y sin argumentos al Partido Popular.