ERC rechaza el acuerdo y emplaza a Zapatero a negociar nuevas mejoras

ERC sigue manteniendo «diferencias notables» con el acuerdo cerrado entre el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder de CiU, Artur Mas, respecto al Estatuto catalán y no lo apoya por el momento. La reunión de cuatro horas que el líder de ERC, Josep Lluis Carod Rovira, mantuvo con Zapatero en La Moncloa no fue suficiente para superar las objeciones de los independentistas catalanes a un texto que, según expresó su secretario general, Joan Puigcercós, mantiene una «diferencia abismal» con el aprobado por el Parlamento catalán el 30 de septiembre. Los principales reparos de ERC se centran en temas relacionados con la financiación. En concreto, Puigcercós pidió una mayor concreción sobre los compromisos de inversión del Estado en Cataluña. Asímismo, reclamó la transferencia de puertos y aeropuertos y la financiación suficiente para suprimir los peajes de las autopistas catalanas. En cuanto a la definición de Cataluña, Carod se mostró dispuesto a mantenerla en el preámbulo ,pero diciendo claramente que «Cataluña es una nación» y no sólo que así lo considera el Parlamento catalán. Más negociaciones Así las cosas, ERC emplazó al Gobierno a seguir negociando para poder alcanzar un consenso final que por ahora ve lejos. Puigcercós criticó a Zapatero por no corresponder a la lealtad que, su juicio, ha mantenido ERC, y a CiU por intentar apropiarse de un Esatuto elaborado por cuatro partidos. Antes de reunirse con el presidente, Puigcercós había asegurado que «el trabajo de dos años se ha tirado por la borda en siete horas». El secretario general de ERC pronosticó que la fórmula de financiación acordada por PSOE y CiU «resultará insuficiente de aquí a dos años». La vicepresidenta del Gobierno dio una versión menos pesimista de la reunión y aseguró que «estamos más cerca del acuerdo». Según dijo, los líderes de ERC se limitaron a pedir más tiempo para valorar el pacto, recibir información más detallada y formular propuestas alternativas. De la Vega destacó el ambiente constructivo con el que los líderes de ERC afrontaron el encuentro con Zapatero, y su contribución en las negociaciones sobre las reformas al texto aprobado por el Parlamento catalán. La vicepresidente admitió que puede haber temas en los que es posible avanzar algo más de lo acordado con Mas, pero en el tema de la financiación dijo que es un ya «un acuerdo muy bueno para Cataluña» y el Gobierno se limitará a dar una información más exhaustiva a ERC para que se sume finalmente al consenso. Otra postura Muy distinta fue la actitud adoptada por el presidente de Iniciativa per Catalunya, quien dio su conformidad al acuerdo estatutario alcanzado el pasado sábado entre el presidente del Gobierno y CiU. Joan Saura, acompañado del portavoz del partido en el Congreso, Joan Herrera, se entrevistó con Rodríguez Zapatero en el palacio de La Moncloa y, junto a su beneplácito, planteó una serie de objeciones que tuvieron suerte desigual. El presidente del Gobierno, reconoció Saura, no se mostró «receptivo» a sus propuestas para «mejorar la identidad nacional» de Cataluña, es decir una definición más taxativa de nación y no sólo descriptiva. Más éxito tuvieron el rechazo a las modificaciones del título de derechos para suprimir los artículos alusivos a la eutanasia o el aborto, como pretende CiU. Zapatero condicionó la supresión a que hubiera consenso, una unanimidad que no se producirá porque, al menos Iniciativa y también ERC, no cederán en este terreno. Saura defendió, además, el acuerdo alcanzado porque es «bueno» para Cataluña porque implica «un salto político del autogobierno como nunca había habido» y va a ser «bueno para España». Reclamó asimismo que nadie pretenda arrogarse la paternidad del texto porque es «de todos», a pesar de que «en estos momentos hay carreras» entre los socialistas y CiU para ser «el padre del Estatut». Pero dedicó las palabras más duras al Partido Popular, que con su propuesta de referéndum en toda España sobre el texto estatutario demuestra su «desesperación». El líder de Iniciativa señaló que la situación de los populares es la lógica de quien dice «que un país se hunde, y luego no se hunde, el que se hunde es él» «El trabajo de dos años se ha tirado por la borda en siete horas» JOAN PUIGCERCÓS Secretario general de ERC