La inmigración se mantiene como segunda inquietud y desbanca al terrorismo y la inseguridad
El paro preocupa a los españoles 20 veces más que los estatutos
Creen que la justicia es lenta, cara y que no trata igual a todos los ciudadanos Piqué defenderá en
El barómetro del CIS del pasado mes de diciembre sitúa al paro como principal problema para los españoles, al ser citado por un 49 por ciento de los encuestados, dato que confirma que el desempleo ha sido la mayor preocupación ciudadana en 2005 al situarse todos los meses en el primer puesto estadístico. El mismo sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas, dado a conocer ayer, confirma la inmigración, por tercer mes consecutivo, como segundo problema (29,4 por ciento), seguido del terrorismo (27,9 por ciento) y la inseguridad ciudadana (22,6 por ciento). La reforma de los estatutos de Autonomía aparece por vez primera en la relación de principales problemas, citada por un 2,4 por ciento, en tanto que los nacionalismos son mencionados por el 2,8 por ciento, cifra que rebaja el 4,3 por ciento que obtuvo este concepto en la anterior encuesta. La muestra, elaborada entre el 16 y el 27 de diciembre, apunta una ligera mejora en la percepción que los españoles tienen de la situación política. Por detrás de los estatutos, 2,4%, aparecen asuntos como los problemas medioambientales (2%), las infraestructuras (1,3%), el racismo (0,8 pro ciento), la agricultura, ganadería y pesca (0,7%) o el terrorismo internacional (0,1%). En la encuesta, queda claro que los españoles ven en la Justicia una institución lenta, cara y que no trata igual a todos los ciudadanos. Sólo el 11,7 por ciento de la población cree que somos iguales ante la ley, frente al 84 por ciento que suscribe que «se hacen diferencias según de quien se trate». La mayoría de encuestados también considera que los tribunales funcionan mal o muy mal, y sólo un 23 por ciento afirma que su trabajo es bueno o muy bueno. El 55,8 por ciento atribuye sus disfunciones a la carencia de medios en los juzgados. En concreto, la inmensa mayoría señala que hacen falta más jueces, más personal auxiliar y mejores instalaciones. En general, los ciudadanos consideran que la efectividad de los tribunales no ha mejorado en los últimos dos o tres años. Otro motivo de queja es la lentitud de los procesos, que hace que el 80 por ciento de los españoles crean que «vale más evitar meterse en pleitos legales». Por otro lado, el 70 por ciento piensa que «no compensa» acudir a los tribunales porque es muy caro.