Las ventas de cava catalán bajaron un 7,3% en España

Las ventas de cava catalán descendieron un 7,27% en España durante 2005, pese a alcanzar los 93,5 millones de botellas (el 42% de su negocio total), debido al boicot realizado desde distintos foros a los productos de esta comunidad autónoma por cuestiones políticas. Así lo anunciaron ayer los responsables del sector, quienes destacaron que, por el contrario, las exportaciones de este popular vino espumoso se incrementaron un 6,3% -el doble que en 2004 y su mejor dato en tres años-, con crecimientos superiores al 30% en varios mercados europeos, incluido el francés, cuna de su principal rival, el champán. La opción de los fabricantes Los datos facilitados por el Consejo Regulador del Cava revelan que el boicot hizo que los ciudadanos españoles redujeran su consumo de este vino espumoso de forma general, sin distinguir tanto en su origen. Así, las ventas totales de cava en el Estado, ya fuera producido o no en Cataluña, cayeron un 6,6%. Algunos fabricantes de esta comunidad optaron por vender sus botellas con etiqueta de otra autonomía (así ocurrió con 306.000 envases), si bien sólo pudieron aplicar este recurso al 25% de la cantidad que comercializaron el ejercicio anterior. El presidente del Consejo, Gustau García, expresó su confianza en que la situación se «normalice» este año y puedan «recuperar esas ventas del mercado interior que nunca se debieron perder». En su opinión, el boicot no se basó tanto en la «libre decisión de los consumidores» como en la respuesta de los canales de distribución, que redujeron sus pedidos de cava para obsequios o lotes navideños. Al contrario, las ventas de champán francés en España crecieron un 40% en 2005, al importarse casi un millón de botellas más (916.000). De hecho, sin ese aumento de la demanda de champán, el cava habría exportado más botellas que su rival francés el año pasado. Aún así, su cifra de ventas al exterior es muy importante, con 128,9 millones de envases (el 58% de los 222,4 millones de botellas de cava que se vendieron en todo el mundo durante 2005). Los crecimientos más importantes entre los 20 mejores clientes nacionales del espumoso de origen catalán se dieron en Austria (68,2%), Portugal (35%), Francia (34,8%), Finlandia (33,1%), Suiza (32,6%) y Bélgica-Luxemburgo (32,3%). Alemania, principal consumidor Por volumen, Alemania se mantuvo como el principal consumidor de cava, pues se quedó con cuatro de cada diez botellas que salieron al exterior (el 43,6% del total, con 56 millones). Su demanda aumentó un 5,7% en 2005, al contrario de lo que ocurrió en el Reino Unido (su segundo mejor cliente internacional, con 29 millones de envases, el 22,7% del total), donde el número de peticiones se redujo un 5,4%. El tercer puesto recayó en Estados Unidos (con 12,7 millones, casi un 5,7% más), seguido de Japón (3,7 millones, un 17% más).