1.375 euros por guardar el cordón en Bélgica
En España no está regulado ni permitido el almacenamiento dirigido, es decir, la congelación de cordones a iniciativa de los progenitores para uso particular en el futuro. Pero hay empresas que actúan de intermediarias con laboratorios extranjeros, principalmente belgas, para conservarlo durante veinte años a precios que oscilan entre los 1.375 y los 2.000 euros. Esta práctica está permitida en varios países europeos. Hay familias españolas que han congelado los cordones ante las expectativas sobre su futuro uso. En León se tiene constancia de una familia que congeló el cordón de un hijo, por si lo necesita su hermano mayor, que superó una leucemia. Los científicos están divididos. Desde la Organización Nacional de Trasplantes Rafael Matesanz asegura que «no hay base científica» para afirmar que un niño pueda beneficiarse de las células madre de su propio cordón pues las enfermedades infantiles tienen un componente genético que impide tratarlas con células propias. Sin embargo, el leonés Carlos Martínez dijo en El País que es un «seguro de vida».