Víctimas del terrorismo apoyan la política de pacificación del PSOE
Un grupo de víctimas vascas del terrorismo de ETA presentaron ayer un manifiesto en el que apoyan los esfuerzos del Gobierno por poner en marcha un proceso de paz que ponga fin a la violencia de la banda armada y respaldan la resolución del Congreso sobre un hipotético diálogo con esta organización criminal. Los firmantes del manifiesto afirman que siempre han apoyado a los distintos gobiernos democráticos en su «lucha por la paz y contra el terrorismo», porque es al Ejecutivo a quien compete dirigir esta política. Por este motivo, ofrecen a José Luis Rodríguez Zapatero la misma «lealtad» que tuvieron con Felipe González o con José María Aznar. Su objetivo es que «las generaciones futuras disfruten de una vida de paz y libertad y que la última víctima del terrorismo haya sido definitivamente la última». El manifiesto fue leído por Mila Sanz, esposa del concejal socialista de Ordizia (Guipúzcoa) Iñaki Dubreuil, herido en febrero de 2001 en un atentado de ETA, y en la rueda de prensa estuvieron presentes, entre otros, concejales socialistas acosados por los terroristas, el periodista herido por la banda Gorka Landaburu y Jesús Ramos, el viudo de la militante del PSOE Maite Torrado, asesinada en 1987 en Portugalete (Vizcaya). El documento también fue firmado por otras víctimas de ETA.