El 76% de la asignación autonómica corresponde a generación concarbón
Los nueve grupos térmicos de la provincia son los más contaminantes
El Plan Nacional de Asignaciones 2005-2007 establece el máximo de emisiones permitidas en este periodo a las actividades que se consideran especialmente generadoras del efecto invernadero, con el fin de ir adaptándose a los requisitos del Protocolo de Kioto. En total en Castilla y León hay 62 empresas incluidas en este plan, que deberán reducir en este periodo sus emisiones contaminantes. De ellas once son centrales térmicas que funcionan con carbón, de las que nueve grupos están ubicados en León y dos en Palencia. De su importancia en este proceso da idea el hecho de que acaparan el 72,3% de la toneladas de CO 2 asignadas al conjunto de las industrias de Castilla y León; lo que según los investigadores «da idea de la dimensión que tiene el sector en el logro del control del cambio climático». Los autores recuerdan las peculiaridades del modelo energético español durante décadas, «basado en el uso de los recursos energéticos propios, es decir, del carbón; junto a un planificación general muchas veces inexistente que fue conduciendo a la economía española a una elevada dependencia energética del exterior y a la ausencia estructural de fuentes de abastecimiento internas alternativas». Situación que hoy palían en cierta medida las energías renovables. En la comunidad el peso del sector del carbón en la generación energética se ha reducido en los últimos años, mientras aumenta la presencia eólica; y siguen teniendo gran importancia la energía hidráulica (que depende de las precipitaciones de cada año) y la nuclear. La comunidad sigue siendo, sin embargo, netamente exportadora de energía, ya que su consumo apenas sobrepasa el 30% de la generación. Además, como muestra del incremento de la actividad económica, el incremento del consumo fue superior a nivel nacional que en la comunidad. Las centrales térmicas incrementaron sus emisiones un 12,3% entre 1992 y el 2003; y las emisiones de CO 2 en la provincia de León creció en este periodo poco más del 5%.