Aznar dice que nunca negoció con ETA y acusa a Zapatero de rendirse

El día en que se cumplían diez años desde su primera victoria electoral, José María Aznar se convirtió en el gran protagonista de la jornada inaugural de la Convención Nacional del PP, en la que proclamó que nunca negoció con ETA, mientras Zapatero «se ha rendido a la banda». El ex presidente dedicó la práctica totalidad de su discurso a reivindicar los logros de sus ocho años de gobierno, que consideró «un aval de credibilidad y de fiabilidad para Mariano y para todo el PP». Contrapuso ese balance brillante al desastroso de los dos años de Zapatero, en los que, dijo, ha colocado a España al borde de la balcanización y ha pactado con los nacionalistas a costa de «hacer más débil a España». En su opinión, si se aprueba el estatuto de Cataluña ya no quedará nada del Estado. «No hay nación, ni estado, que sobreviva a un proceso como el que está viviendo España», aseguró. Por ello, la tarea es «conseguir que en nuestro futuro común siga existiendo España como patria de la libertad, la solidaridad y de la igualdad». Pero lo que de verdad le interesaba dejar claro ayer es que su política antiterrorista es radicalmente opuesta a la de Zapatero, que está «mendigando» una tregua, con lo que ETA «les está humillando y humillándonos a todos los españoles». Negociaciones El presidente de honor de los populares explicó que él no negoció con ETA, sólo se limitó a comprobar si estaba dispuesta a rendirse nueve meses después de que decretara una tregua, en un «único encuentro con la dirección de la banda». Su Gobierno no aceptó las «contrapartidas políticas» que exigían los terroristas, y por eso no hubo más encuentros y sí la continuación de una lucha sin cuartel hasta llevar a ETA al «momento más débil de su historia». Nada que ver, en su opinión, con lo que están haciendo Zapatero, que «nunca habla de derrotar a los terroristas, de lo que habla es de que acabe la violencia». Algo que se consigue dándoles «lo que durante 35 años han reclamado con las armas en la mano». Aznar afirmó que el Gobierno de Zapatero ha dejado que ETA fije los tiempos de la política antiterrorista, ha abierto el camino de la negociación política, ha menospreciado a las víctimas, ha permitido la presencia de los proetarras en el Parlamento vasco, ha excarcelado a los terroristas y se olvida de condenar los atentados. Frente a eso, los populares «nunca bajamos la cabeza, nunca doblamos la rodilla». Y concluyó: «Una cosa es luchar y otra claudicar. Una cosa es vencer y otra rendirse». En el discurso que abrió el cónclave popular, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón hizo un llamamiento a la moderación para «neutralizar el mensaje radical» de los socialistas. El tono de la intervención de la presidenta de la comunidad madrileña, Esperanza Aguirre, fue más mitinero y beligerante con el PSOE, al que acusó de tener una única política: «destruir al PP», que sufre la «agresión constante» de nacionalistas y socialistas. «Al único encuentro con la dirección de la banda terrorista ETA, celebrado tras nueve meses de tregua en Suiza en el año 1998, el Partido Popular sólo fue a una cosa: a comprobar si sus miembros estaban o no dispuestos a rendirse. Y como nos dimos cuenta de que no sólo no estaban dispuestos a rendirse, sino que lo que querían era negociar condiciones y contrapartidas políticas, los terroristas volvieron a sus métodos: matar, amenazar y extorsionar» JOSÉ MARÍA AZNAR Ex presidente del Gobierno