Zapatero solicitará el respaldo del Congreso antes del verano, cuando confirme el cese de la violencia

José Luis Rodríguez Zapatero pedirá antes del verano el respaldo del Parlamento para abrir un proceso de diálogo con ETA. El Gobierno cree que la organización terrorista hará público un tercer comunicado en las próximas semanas, pero mientras comprobará si la tregua es real. Cuando verifique que la intención de la banda es sincera, el Ejecutivo hará lo que esté en su mano para «que los terroristas dejen de ser terroristas», sin que los demócratas dejen de ser demócratas un solo instante, según la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega. «Ahora hay una esperanza fundada de que esto se termine». Rodríguez Zapatero se mostró así de optimista en la conferencia de prensa que ofreció al término de la cumbre europea, en la que reiteró el llamamiento a la calma y a la prudencia que tanto él como su Gabinete han realizado desde el día del anuncio de la tregua. Fuentes gubernamentales confirmaron que el Ejecutivo espera que en las próximas semanas ETA haga público un tercer comunicado, en la línea de los dos anteriores. Pero, al margen de los pasos que la banda dé a partir de ahora, la orden que las fuerzas de seguridad del Estado y los servicios secretos han recibido de la Moncloa es que comprueben que los terroristas han dejado atrás todo tipo de violencia, también la calle-jera, y que ya no extorsionan ni chantajean. «Certidumbre» Zapatero explicó en Bruselas que el Gobierno tiene «medios suficientes para verificar lo que representa el alto el fuego permanente, para tener certidumbre de que ese alto el fuego permanente es la antesala del final definitivo» de la organización terrorista. Por eso utilizará todos esos medios para verificar el fin de la violencia antes del verano, y, si para entonces tiene la «certidumbre» de que la tregua es real, acudirá al Congreso de los Diputados para, en un pleno solemne, pedir el respaldo formal de todos los grupos «para acabar con ETA por la vía dialogada», tal y como prometió en el Parlamento en el 2005. El presidente del Gobierno considera que el proceso ya ha comenzado y que será «de largo alcance», por lo que pidió paciencia a los ciudadanos para poder hacer «las cosas bien». «Comprendo el infinito deseo de todos los españoles que se sienten esperanzados de que las cosas vayan lo más rápido posible, pero necesitamos tiempo», reclamó.