Más de 16.000 personas fueron detenidas durante el 2005 por tráfico de drogas

Las Fuerzas de Seguridad detuvieron en 2005 a 16.299 personas por delitos relacionados con el tráfico de drogas, un 14,4 por ciento más que en 2004. Además, en 2005 hubo 197.186 decomisos de distintas sustancias estupefacientes, un 16,30 por ciento más que el anterior. El 93 por ciento de la droga intervenida eran cannábicos -hachís, mariuana- y cocaínicos como la cocaína, el crack y la pasta de cocaína. En 2005, la Policía y la Guardia Civil desarrollaron 768 operaciones de importancia contra las redes que intentan introducir droga en Europa, operativos que permitieron incautar 48,4 toneladas de cocaína y 669,7 toneladas de hachís. Además, se incautaron 11,2 toneladas de cánnabis; 332 kilos de marihuana; 331 kilos de grifa; 19.500 unidades de alucinógenos -la mayoría LSD-; 572.871 unidades de éxtasis, 174 kilos de heroína; 33,5 kilos de speed y 8.781 anfetaminas. La Policía y la Guardia Civil practicaron 173.096 denuncias por consumo o tenencia de drogas. En el 82 por ciento de las detenciones realizadas fueron incautados en poder de los arrestados derivados del cánnabis y cocaína. En el resto de detenciones la policía decomisó, sobre todo, estimulantes, opiáceos y alucinógenos. Cocaína y heroína Las operaciones más destacadas en 2005 fueron contra el tráfico de cocaína. Hubo 238 dispositivos, en los que la policía decomisó una media de 196 kilos de droga. También se efectuaron 30 operaciones destacadas contra el tráfico de heroína, y 45 contra el de éxtasis. La cantidad media de droga intervenida en ellos se situó en unos 5 kilos de heroína y unas 10.000 dosis de éxtasis. El mayor número de operaciones, 445, correspondieron a la lucha contra el tráfico de hachís. La incautación media por operación alcanzó los 1.453 kilos. El resto de operaciones destacadas se dirigieron a combatir el tráfico de speed , LSD y anfetaminas. El ministro del Interior, José Antonio Alonso, felicitó a las fuerzas de seguridad por su «eficacia» en la lucha contra el narcotráfico y aseguró que no dará «ni un segundo de respiro a quienes ponen en riesgo la salud y la vida de los ciudadanos». Por otra parte, agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron ayer en el aeropuerto de Barajas a un ciudadano mexicano que pretendía introducir en España 6.600 gramos de cocaína, que ocultaba en una faja adosada a la cintura. Según las fuentes, José Francisco P.J., de 53 años, llegó a Madrid en un vuelo procedente de México y fue arrestado por los agentes del Grupo de Estupefacientes acusado de un delito contra la salud pública.