El alcalde de La Vecilla envía un telegrama de condolencia y pésame a Gijón

El alcalde de la Vecilla del Curueño, Francisco Rojo Martínez, mostró ayer su consternación en declaraciones a este periódico por el accidente ocurrido en la autopista León-Campomanes y que costó la vida a cuatro personas -dos monitores y dos niños- que habían disfrutado de los cuatro días de Semana Santa en el pueblo de La Vecilla, concretamente en la colonia de San José. «Es una tragedia y una pena muy grande que el pueblo siente como si fueran gente de aquí, porque es una parroquia -la de San José de Gijón- muy ligada al municipio», precisó Francisco Rojo, quien acto seguido indicó que ya había remitido un telegrama de pésame dirigido a toda la parroquia de San Miguel del barrio de Pumarín en Gijón, de donde eran todos los niños y monitores que viajaban en el autobús. Asegura que se enteró del accidente por la radio y rápidamente trató de informarse qué había sucedido y cuántas personas habían fallecido. La Vecilla como destino El alcalde de La Vecilla indicó que eran gente muy querida por el pueblo, «ya que siempre aprovechan cualquier periodo vacacional para visitarnos y eso es muy de agradecer, porque es cierto que en verano nuestro pueblo se llena de turistas, pero ellos nunca fallan, sea verano o invierno, siempre que pueden se acercan hasta La Vecilla», precisó el regidor.