| Reportaje | Turismo de despensa |
A casa a reponer viandas
No sólo la hostelería, sino el comercio, en particular el relacionado con la alimentación tradicional, se beneficia de la afluencia de un turismo que valora especialmente la calidad gastronómica leonesa
Papones, procesiones, limonadas, fiesta, buena mesa,... Pero los miles de personas que en los últimos días han invadido la provincia buscan algo más. El souvenir favorito de los viajeros no es una madreña con el «Recuerdo de León» grabado en un costado, sino un chorizo de la montaña, la inigualable cecina y, para los que no teman perfumar el vehículo en la vuelta, las prestigiosas morcillas de la zona. Por eso, además de los negocios de hostelería, los comercios leoneses se han beneficiado estos días del aluvión turístico. Así lo reconoce Juan Hernández Dopico, presidente del Centro León Gótico, el centro comercial abierto de la capital. «Los productos típicos de la cocina leonesa viven un incremento importante de ventas estos días, son muchos los turistas que quieren llevarse a casa alguno de los bocados que han probado en bares y restaurantes». Aunque los mejores clientes no son precisamente los de fuera. «Los que más compran son los leoneses que viven en otras ciudades, y que regresan a su tierra a pasar los días de Semana Santa. Muchos vuelven con las reservas bien aseguradas». Lo cierto es que en los últimos días (muchos establecimientos abrieron el jueves y sábado santos) los comercios leoneses notaron un sensible incremento en la afluencia de clientes, en mayor medida los de alimentación, pero también el resto de los sectores, según Hernández Dopico. «Cada año viene más gente, y eso favorece sobre todo a los negocios de hostelería, que están encantados, pero también al resto de los comercios». A parte de los leoneses de origen, gallegos y asturianos son los que más se acercan a estas tiendas a aprovisionarse convenientemente. «Porque la Semana Santa en León es mucho. Son procesiones, tapeo en el Húmedo, limonadas,... Pero también dejarse llevar por el deseo de disfrutar después en casa de una parte de esta gastronomía que tantas pasiones levanta».