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Poco más de la mitad de la población en edad laboral tiene un puesto de trabajo actualmente en la provincia

León debe crear más de 18.000 empleos si quiere cumplir los objetivos de la UE

El Gobierno se ha fijado como meta alcanzar el 66% de tasa en el 2010

León

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«Como en un nuevo cuento de la lechera, nuestra enfermedad provinciana está a punto de dar al traste con un cántaro que apenas empieza a modelarse» IGNACIO FERNÁNDEZ Y ARTURO FERNÁNDEZ, secretarios provinciales de CC.OO. y UGT León deberá crear en los próximos cuatro años algo más de 18.000 puestos de trabajo si quiere acercarse a los objetivos de nivel de empleo que recientemente se ha fijado el Gobierno, con el fin de cumplir las metas fijadas en el conjunto de la Unión Europea (UE) dentro de la Estrategia de Lisboa. Actualmente, poco más de la mitad de los leoneses en edad de trabajar tiene un puesto laboral renumerado, según los últimos datos estadísticos sobre el mercado laboral. Este porcentaje (exactamente un 56%) se encuentra diez puntos por debajo de la media que el Gobierno se ha fijado para cumplir en el 2010: un 66% de tasa de empleo, que en el Programa Nacional de Reformas de España para la convergencia y el empleo se define como la proporción entre la población ocupada y la población en edad de trabajar. Los últimos datos reflejan que en León trabajan actualmente 180.100 personas (según las cifras de la Encuesta de Población Activa del primer trimestre del 2006). La población en edad de trabajar supera los 320.000 ciudadanos, aunque el número de inactivos en la provincia es de 222.100, más de 20.000 por encima de los 201.500 leoneses que se registran como activos. Convergencia y empleo El programa nacional de reformas aprobado por el Gobierno a finales del 2005 se propone «alcanzar en el 2010 la convergencia plena en renta per cápita, y superar ese año la tasa de empleo de la UE». En el conjunto del país esta tasa alcanzó en el 2004 el 61,1%, casi cinco puntos por encima de la cifra registrada cinco años antes. Según el Ejecutivo, esa evolución se debe a la reducción del desempleo, la incorporación de la mujer al mercado de trabajo y la «considerable» entrada de emigrantes. El objetivo de tasa de empleo que se propone para el 2010 es del 66%, aunque en el conjunto de la UE el objetivo de Lisboa apunta un 70% en ese ejercicio. El programa español contempla que el paro entre los varones se sitúe «significativamente» por debajo del europeo; mientras que para las mujeres aspira a que los niveles de desempleo al menos se igualen. Aún cumpliendo el reto marcado para el conjunto del país, España seguiría lejos de cumplir los tres objetivos originales de la Estrategia de Lisboa, que apuntan una tasa de empleo global del 70%, que será del 60% en el caso de las mujeres; y también del 50% para los trabajadores y trabajadoras de entre 50 y 64 años. Temporalidad Tanto los objetivos europeos como los nacionales hacen hincapié en uno de los problemas que desde los sindicatos leoneses se considera una de las principales lacras del mercado laboral de la provincia: la temporalidad. Uno de cada tres trabajadores tiene un contrato con una duración determinada, y la temporalidad es más del doble que la media europea. En León, sólo uno de cada nueve contratos que se firman es indefinido. El informe del Ministerio de Trabajo sobre las reformas laborales para abordar la convergencia europea en el mercado laboral reconoce que en los últimos años la temporalidad en el sector privado ha sufrido una ligera reducción, de menos de un punto; y sin embargo en el sector público ha aumentado más del 2,5%. Por sectores, es la construcción el más afectado por esta falta de estabilidad, junto a las actividades claramente marcadas por la estacionalidad, como el turismo y la agricultura. También está claro cuáles son los colectivos entre los que la temporalidad afecta en mayor medida: mujeres y jóvenes, además de aquellos trabajadores poco cualificados y los inmigrantes. El Gobierno reconoce el argumento sindical de la lacra que supone la temporalidad: «No sólo es negativa para quien la padece, sino para la economía en su conjunto, ya que desincentiva la inversión en capital humano por las empresas y los trabajadores y genera una excesiva rotación laboral». También recoge como otras características del mercado laboral español el elevado desempleo juvenil, los escasos contratos de jornada parcial, la reducida movilidad y la elevada siniestralidad. CALIDAD DE VIDA Los leoneses están en general satisfechos con las características del trabajo que realizan, según se deduce de la Encuesta de calidad de vida en el trabajo, realizada por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. Lo califican con un notable alto. ESTRÉS Es uno de los principales problemas que detectan los trabajadores locales, aunque en una escala del 1 al 10, este asunto sólo les preocupa en una medida que apenas supera el 4. MONOTONÍA La mayor parte de los trabajadores no considera que su empleo sea especialmente monótono, y le dan una importancia sólo relativa. ORGULLO En cambio, sí se consideran muy orgullosos del trabajo que desempeñan; de forma que valoran esta característica con un 8 sobre 10. PARTICIPACIÓN La mayor parte de los trabajadores considera adecuado su nivel de participación en las tareas de la empresa. OBJETIVOS Llama la atención que los trabajadores valoran muy positivamente el conocimiento que tienen de los objetivos de sus empresas.