Sólo un afectado recupera la pensión dos años después de la normativa
Sólo un afectado de León ha comenzado este año a cobrar las primeras pensiones amparadas en la normativa dictada hace dos años para reconocer la situación excepcional de estas personas que, por la enfermedad, no han podido trabajar. La Seguridad Social, explica el letrado Luis Alberto Díaz, ha comenzado a reconocer las pensiones a los trabajadores afectados por el síndrome tóxico que ampara la Orden del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales de 25/11/2004 (jubilación, incapacidad permanente y fallecimiento), esto es, a quienes en el año 1981 estuviesen en alta en la Seguridad Social y hubiesen tenido que dejar de cotizar al contraer la enfermedad. De momento quedan fuera de este derecho quienes entonces eran menores de edad (un centenar en León) o no habían accedido al primera empleo, como las más de 300 amas de casa afectadas. «Es indignante que no se resuelva su situación porque quedarán como perros, en la calle», recalca el letrado. No obstante, la medida no es suficiente para la asociación de afectados de León que pide la extensión de estas ayudas vitalicias a todos los enfermos que lo necesiten y no para quienes tengan varios años de cotización. «Nos da igual que lo llamen pensiones o ayudas o cómo quieran, todos los que tienen alguna incapacidad necesitan esas ayudas», explica Abel Fernández, presidente de la Asociación Leonesa de Afectados. La asociación reclama una ley que derogue el Real Decreto de 1981 «que establecía unas ayudas que eran válidas entonces pero que no son para ahora. Esto solucionaría un problema para siempre ya que nunca va a haber más afectados, cada vez somos menos y en treinta años estas ayudas estarían extinguidas», recalca. Fernández recuerda que el entonces diputado por León, José Luis Rodríguez Zapatero, solicitó en 1999 la derogación de la norma que impedía a los enfermos cobrar la indemnización sin descontar las ayudas y prestaciones recibidas previamente. Un clavo al que se agarran las asociaciones de afectados para pedir la extensión de las pensiones a todos los afectados hubieran o no cotizado a la Seguridad Social. «Es un acto de justicia social, más allá de cualquier debate político», indicó Zapatero. «Ahora le pedimos que cumpla su promesa», recalcan los responsables de la asociación leonesa.