Defensa moviliza tres aviones y tres buques para reforzar la vigilancia
El Ministerio de Defensa movilizó ayer tres buques y tres aeronaves para reforzar la vigilancia costera ante la masiva llegada de cayucos cargados de inmigrantes a las costas de Canarias. Se trata de tres patrulleras, dos de ellas de altura y otra de costa, y tres aviones P3-Orión, según afirmó el lunes la vicepresidenta, que apoyarán a la Guardia Civil en su tarea de interceptar embarcaciones cargadas de indocumentados. Un portavoz del Ministerio de Defensa aclaró que, por el momento, sólo uno de los aviones está operativo y los otros dos entrarán en servicio a lo largo de esta semana. Este despliegue aeronaval forma parte de las medidas extraordinarias que acordó el Gobierno el lunes para poner fin a la avalancha de indocumentados hacia el archipiélago. Información en tiempo real La misión de esos barcos y aviones será apoyar el trabajo del servicio marítimo de la Guardia Civil mediante la aportación de información en tiempo real sobre la existencia de embarcaciones con sin papeles a lo largo de la costa canaria o africana. El lunes, la número dos del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, señaló que los aviones llevarán a cabo misiones de reconocimiento en la zona de Senegal, el país del que parten en la actualidad la mayoría de subsaharianos. El ministro español de Exteriores manifestó, después de un encuentro con su homólogo alemán, que «el desafío es de tal envergadura que necesitamos la ayuda y el compromiso de todos. España sola no será capaz de resolver los grandes desafíos de la migración subsahariana». Tres cayucos más Mientras, en la jornada de ayer llegaron a Canarias tres cayucos con casi 200 inmigrantes más. En los dos primeras viajaban 61 y 73 personas respectivamente, mientras que la tercera tuvo que ser rescatada por Salvamento Marítimo cerca de Tenerife, con 80 personas a bordo. Todos los subsaharianos eran adultos a excepción de un menor que además fue trasladado a un centro hospitalario por presentar una hipoglucemia por deshidratación. Los centros para la recepción de inmigrantes están saturados.