Una biblioteca, un auditorio y una sala de exposiciones en Astorga
El centro cultural Lyda lleva el nombre de una antigua esclava griega cuya lápida mortuoria se conserva en el museo Romano. El complejo estará dotado de una biblioteca, un auditorio y un espacio para congresos de tipo medio -entre cien y doscientas personas- y exposiciones. El proyecto definitivo, que el Ministerio de la Vivienda contratará en breve, determinará la configuración y características de la construcción, aunque las bases de ésta ya figuran en el anteproyecto que el arquitecto Víctor López Cotelo realizara en 1996 por encargo del Ayuntamiento y que actualizara tiempo después. A la espera de la propuesta final, algunos puntos ya están claros: será preciso demoler la actual biblioteca -la nueva estará dotada de mayor espacio- y el complejo, al menos parcialmente, ocupará el solar en el que aparecieron los restos de uno de los límites del foro romano de la antigua Astúrica Augusta, que la comisión de Patrimonio de León ordenó conservar en 1998. Precisamente, el alcalde, Juan José Alonso Perandones, apuntó ayer que, tras la realización de excavaciones arqueológicas recientes en el entorno de la biblioteca con motivo de la construcción del centro, dicho órgano dependiente de la Junta sólo ordenó conservar los vestigios de la que fuera plaza pública por excelencia de la ciudad romana. El regidor matizó que los nuevos trabajos de análisis del solar dejaron al descubierto sólo parte de la antigua sinagoga judía, aunque «estaba muy deteriorada y, como hallazgo arqueológico, era poco relevante, aunque lo fuera por cuestiones históricas», señaló. El complejo cultural ocupará una parcela de unos seis mil metros cuadrados situada en la zona que ocupa la actual biblioteca municipal y el solar que alberga parte del foro. El Ayuntamiento trasladará, de manera provisional y durante el tiempo que dure la ejecución de los trabajos, los fondos y materiales de la primera al edificio que, en la plaza de los Marqueses, ocupó hasta hace unos meses el centro de día de enfermos de alzheimer de la ciudad. La tramitación de esta intervención sufrió no pocos avatares desde 1996, que pasaron por la suspensión del proyecto por falta de compromiso de financiación de instituciones supramunicipales y por la necesidad de rehacer el anteproyecto por la aparición posterior de los restos del foro, no localizados inicialmente.