Roma verifica «milagrosas curaciones» en La Bañeza para santificar a un obispo

«Fundó la ciudad pensando en un grupo de niños pobres, hijos de emigrantes que vivían con sus abuelos» MERCEDES MORATINOS, directora de las Misioneras Apostólicas de la Caridad en La Bañeza La Congregación para las Causas de los Santos, con sede en Roma, tramita el proceso conjunto de beatificación y canonización de Ángel Riesco Carbajo, fundador del Instituto de las Misioneras Apostólicas de la Caridad de La Bañeza y a quien se le atribuyen milagrosas curaciones que todavía están por verificar. El caso se está llevando con el máximo secretismo. El expediente -así lo hacen entender en los obispados de León y Astorga- debe ser materia reservada, como si se tratara de un sumario judicial. Ni siquiera los que fueron convocados a los interrogatorios para confirmar las virtudes milagrosas de don Ángel -como se le conoce en La Bañeza- tiene constancia del resto de declaraciones. Todos estos alicientes que rozan lo novelesco forman parte de una historia para la que la Iglesia busca respuesta, una solución al enigma que plantea la figura potencialmente milagrosa de este evangelizador fallecido en 1972. Según los datos que ha podido recabar este periódico en los dos obispados y en el hogar que Ángel Riesco fundó en La Bañeza, uno de los argumentos utilizados en el proceso diocesano de su canonización es el reconocimiento de un hecho que, de confirmarse, excedería cualquier fuerza o facultad de la naturaleza. ¿Por gracia de don Ángel? Se trata de la, cuando menos, sorprendente curación de una joven bañezana. Todo ocurría hace diez años. «Los médicos la habían diagnosticado una enfermedad... digamos que incurable», confiesa cautelosa la postuladora del proceso. Estaba embarazada y la complicación cerebral, además de a ella, ponía en peligro severo la vida del feto. «Ella, pero principalmente su marido, se encomendaron a don Ángel», explica Mercedes Moratinos. A partir de entonces, el cuadro clínico de la joven comenzó a cambiar de una forma extraordinaria, hasta lograr combatir la enfermedad y dar a luz a un niño que hoy tiene diez años. Lo que excede a la naturaleza La postuladora de la causa, cuya parte actora es el Instituto Secular Misioneras Apostólicas de la Caridad, de la que es directora general, anunció que la figura de Ángel Riesco, nacido en Zamora pero asentado desde muy joven en León, está relacionada con «más gracias», aunque no avanzó más datos y mantuvo las reservas lógicas que requiere un proceso de estas características. La primera fase del proceso ya está superada. Es la que viene a concluir que hay visos de que el hecho milagroso puede ser válido. En octubre se cumplirán dos años desde que el expediente fue enviado a Roma para su estudio por parte de la congregación dependiente de la Santa Sede. Pero la investigación se abrió a mediados de los 90. Las misioneras crearon un grupo de trabajo para recabar datos sobre las virtudes heróicas de Ángel Riesco. Según la legislación vigente, para canonizar a alguien es necesario constatar una acción o hecho milagroso atribuido a la intercesión de su persona.