DEBATE EN EL PARLAMENTO EN UNA MISIÓN DE LA UE POR DEUDAS DE DROGA
PSOE y BNG quieren el término nación en el Estatuto de Galicia Otro grupo de militares parte al Congo para vigilar las elecciones Presos españoles en el extranjero denuncian torturas y coacciones
Socialistas y nacionalistas defendieron ayer definir a Galicia como nación en el nuevo estatuto de autonomía. El Parlamento autonómico abrió el debate sobre la reforma con llamadas al consenso de los grupos parlamentarios aunque de momento las posiciones son dispares. El PP abogó por mantener en el texto la fórmula de nacionalidad histórica que se acordó en la ley de 1981. El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, emplazó al líder del PP, Alberto Nüñez Feijoo, a reconocer el carácter nacional de Galicia y aseguró que ello no es incompatible con el artículo 2 de la Constitución que garantiza la unidad de la nación española. El jefe del Gobierno autonómico tendió la mano al primer partido de la oposición para alcanzar un acuerdo y ofreció a su portavoz tres propuestas. | a. ojea Un segundo grupo de militares, formado por 58 efectivos pertenecientes a la Unidad de Apoyo el Despliegue, parte hoy hacia la República Democrática de Congo para preparar el inminente despliegue del contingente español en una operación de la UE en este país africano. En total, 130 soldados españoles irán este país africano en una misión militar europea de apoyo a las primeras elecciones democráticas de la historia, previstas para el 30 de julio. Este nuevo grupo está integrado por militares de varias unidades logísticas y tras realizar sus cometidos de facilitar el despliegue regresará a España el 14 de julio. | efe El último informe anual del Defensor del Pueblo recoge distintos testimonios sobre la situación que viven los presos españoles en cárceles de Ecuador y Marruecos, con denuncias sobre la existencia de tortura con descargas eléctricas, coacciones y ausencia de las mínimas condiciones de salubridad y habitabilidad. Dos de las cárceles a las que alude el informe 2005 son las de Tánger (Marruecos) y la de Rodeo, en Portoviejo, provincia de Manabi (Ecuador). Todo está relacionado directamente con las deudas contraídas por la compra de droga dentro de las cárceles. | efe