Julián Muñoz aún no ha coincidido en prisión con sus ex compañeros

El ex alcalde de Marbella Julián Muñoz, que ingresó el jueves por la noche en la prisión de Alhaurín de la Torre (Málaga) por el caso Malaya contra la corrupción en el Ayuntamiento marbellí, comparte celda con otro preso y aún no verá a los diversos ex integrantes de la corporación local también encarcelados. Muñoz está en una celda del módulo de ingresos con un recluso primario, considerado como de escasa conflictividad, y no estará en contacto con el resto de internos del centro que están asignados a los demás módulos hasta que al ex alcalde no se le adjudique uno de esos departamentos, lo que no se producirá hasta el lunes o martes próximo. Por ello, no verá a los otros ex cargos del consistorio que entraron mucho antes a la cárcel, como la ex alcaldesa Marisol Yagüe o el ex asesor de Urbanismo del Ayuntamiento Juan Antonio Roca, de quien, según la Fiscalía, recibió «pagos» Julián Muñoz «como consecuencia de una contraprestación municipal». Aún no ha recibido visitas El ex alcalde ya ha hecho uso de su derecho a poder efectuar una llamada telefónica desde la cárcel y, a partir de ahora, podrá hacer cinco a la semana, de cinco minutos cada una, pero hasta primeras horas de la tarde de ayer no había recibido aún visita alguna, lo que no se impide por el hecho de que esté en el módulo de ingresos. Muñoz llegó a esta prisión, donde había ya otros 22 encarcelados por el mismo caso, hacia las 23.45 horas del jueves, sin que el resto de reclusos, que estaban en sus celdas, tuvieran constancia de la llegada porque el furgón policial accedió directamente a la zona de ingresos. Sí están en el mismo módulo de ingresos los otros encarcelados también el jueves por este caso: el ex secretario provincial del Partido Andalucista (PA) y ex teniente de alcalde Pedro Pérez y el presidente y el director general de la promotora inmobiliaria Aifos, Jesús Ruiz Casado y Jenaro Briales, respectivamente. El magistrado Miguel Ángel Torres estimó que las declaraciones de los implicados han puesto de manifiesto que Roca fue el que organizó la moción de censura, a partir de la cual compró «la voluntad de los representantes elegidos por el pueblo con las cantidades que recibe de los promotores» para que «se sometan a sus designios votando sin mayores complicaciones todo lo que venía de planteamiento y otros actos de su interés». Las anotaciones de Juan Antonio Roca en los libros de contabilidad demuestran además, según el auto, que los 14 ediles que firmaron la moción recibieron pagos en otros 14 sobres, todos con la misma cantidad. Diez de estos concejales ya están en la cárcel y otros dos en libertad con fianza, uno en libertad sin fianza y un cuarto se encuentra huído.