150.000 euros y permuta de terrenos

Julián Muñoz, encarcelado el jueves por la noche por su implicación en la trama de corrupción urbanística descubierta en la operación Malaya, aceptó mientras era alcalde Marbella tres sobornos por valor de 150.000 euros de manos del cerebro de la red, Juan Antonio Roca. Así figura en el auto de prisión del ex primer edil, que precisó que estos tres pagos figuran en la contabilidad de noviembre del 2002 de la empresa instrumental de Roca Maras Asesores bajo las iniciales JMP. Además, ese mismo mes firmó una permuta de terrenos a favor de una sociedad atribuida a Roca. Con esta trueque, cambiaba una parcela municipal de un millón y medio de euros por un terreno privado que apenas valdría 30.000 euros. Otro auto de prisión, el del ex concejal del Partido Andalucista Pedro Pérez, también recogió que Roca, antes la moción de censura que sacó a Muñoz del ayuntamiento, compró las voluntades de los concejales elegidos por los ciudadanos con cantidades de dinero que recibía de los empresarios. El escrito señala que al menos cinco de los ediles imputados tenían bolsas de dinero en sus casas. Se trata de la primera teniente de alcalde, Isabel García Marcos y los concejales Victoriano Rodríguez, Carmen Revilla, Tomás Reñones y Rafael González. Corrupción generalizada El juez coincidió con las conclusiones policiales respecto a la existencia de «una situación generalizada, extendida y prolongada en el tiempo de evidente corrupción política y económica». Además de los sobornos realizados para conseguir echar a Julián Muñoz de la alcaldía, Roca repartió sobres entre los concejales del entonces equipo de gobierno, y a algunos que no pertenecían al mismo para que con su voto o su abstención favoreciesen la aprobación de algunas propuestas. Percibían mayores cantidades según su rango.