Diario de León

El fuego se originó a primera hora de la tarde en Valdelaloba (Toreno) y la Junta decretó el nivel 2 por su elevado riesgo

Las llamas cortan la autovía a Toreno y amenazan con arrasar una gasolinera

A media tarde, el incendio había calcinado más de 200 hectáreas de pinar y matorral

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M. Luengo / R. Arias - cubillos | ponferrada
Ponferrada

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Un imponente incendio declarado a primera hora de la tarde de ayer en la localidad de Valdelaloba (Toreno), a apenas 15 kilómetros de Ponferrada, puso en jaque a todos los servicios de extinción de la Junta de Castilla y León y llevó el pánico a los habitantes de las poblaciones del entorno, como Finolledo y Fresnedo (Cubillos), así como también a los conductores de la carretera C-631. Esta es la vía rápida que une la capital del Bierzo con Toreno y más allá con Villablino, que la Guardia Civil se vio obligada a cortar al tráfico, en un primer momento porque el intenso humo dificultaba la visión de la calzada, y más tarde porque las llamas amenazaban con arrasar la estación de servicio situada al borde de la misma, en el acceso a Fresnedo. Hacia la media tarde, y según las primeras estimaciones realizadas por la Junta, el fuego había calcinado más de 200 hectáreas de matorral, pastos y pinar. La virulencia de las llamas y su altura, que se levantaban más de cinco metros sobre el horizonte y en varios frentes, impulsó a los agentes de la benemérita a interrumpir la circulación de vehículos hacia las 18.30 horas, por el riesgo sobre todo de que el fuego -que se quedó a escasos 50 metros de los depósitos- penetrase en la gasolinera. Por tierra y aire En el operativo de extinción se integraron desde un primer instante más de 90 personas. Entre ellos, medios aéreos de los equipos de extinción de incendios de la Junta de Castilla y León, que trabajaron en colaboración con dispositivos del Gobierno central, como cuatro helicópteros -uno de ellos de coordinación- y también un avión anfibio. Colaboraban asimismo tres autobombas y tres bulldozer en apoyo de cuatro cuadrillas de tierra y tres más helitransportadas, amén de ténicos y agentes medioambientales, y una brigada de incendios forestales. En las localidades de Valdelaloba, Finolledo y Fresnedo, los vecinos también intentaban contener por sus propios medios el avance de los distintos frentes, ayudando en el monte y con la colocación de mangueras en la carretera para frenar el fuego en el caso de que éste llegara a poner en peligro sus casas. Sin comunicación A las 18.10 horas, el delegado de la Junta, Eduardo Fernández, anunció el decreto del nivel 2 de alerta por los riegos del fuego para las personas y bienes materiales en la zona. A esa hora era ya casi imposible mantener comunicación a través de los móviles y de las líneas fijas de teléfono en las poblaciones mencionadas. Hacia las 19 horas, el viento propagaba las llamas con rapidez hacia Fresnedo dificultando aún más las labores de extinción. La densidad del humo complicó el trabajo de los medios aéreos, que se vieron limitados a arrojar el agua desde gran altura. Desde la autovía, los agentes realizaron un contrafuego para atacar a las llamas, que a última hora de la tarde aún no se podían dar por controladas. Un pirómano o más de uno está detrás del pavoroso incendio originado entre Valdelaloba y Finolledo. Esa es la primera conclusión de los expertos de las Brigadas de Investigación de Incendios Forestales (BIIF), trasladados a la zona. A su juicio, el fuego fue intencionado casi sin ningún género de dudas.

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