El fuego arrasó el 2,6% de Galicia

Cayeron las primeras lluvias intensas sobre la tierra quemada y también cayeron, como del cielo, los primeros datos oficiales relativos a los incendios forestales. La Consejería de Medio Rural mandó parar ayer el baile de cifras que se venía celebrando en Galicia en los últimos días, al admitir con cierta crudeza que entre los días 4 y 15 de agosto ardieron un total de 77.000 hectáreas, es decir, el 2,6% de la superficie total de la comunidad autónoma. El responsable de Medio Rural, Alfredo Suárez Canal, reconoció sin ningún tipo de paliativos que se trata de una cifra grave e importante, «sin ninguna duda», dijo, e incluso admitió que se superaron de manera ostensible algunas de las previsiones que se manejaban desde la propia Administración gallega. Además, la mitad de las hectáreas que fueron arrasadas por las llamas en los últimos doce días pertenecen a la provincia de Pontevedra, un total de 38.500, mientras la demarcación de La Coruña salda su cuenta de agravios con otras 28.000 hectáreas destruidas, el 36,3% del total. En las dos provincias orientales, los daños fueron sensiblemente inferiores. En Orense ardieron 8.500 hectáreas, con el matiz de que el consejero considera que se trata de un dato posiblemente sobreponderado. En Lugo, la cifra es de 2.000 hectáreas perdidas de superficie arbolada y monte raso. Como en dos años Con respecto a la superficie forestal que posee la comunidad, el fuego arrasó en estos doce días hasta el 3,7% del total. Las cifras sobre la extensión quemada son realmente de las peores de los últimos años, ya que elevan la cuenta acumulada del 2006 hasta las 91.000 hectáreas, es decir, tanto como en el último bienio. De hecho, el ejercicio del 2005 se cerró con la destrucción de 53.000 hectáreas, en tanto que en el 2004 se incendiaron otras 32.000. El titular de Medio Rural, matemático de formación, aludió a su escrupulosa política informativa en relación a las cifras para disculparse ante los periodistas que reclamaban más datos pormenorizados. Sólo avanzó que el número de incendios en los que ardieron más de 500 hectáreas son un total de cuarenta y entre ellos se encuentra el de Cerdedo, que se cobró dos víctimas mortales y que acabó afectando a cinco municipios (Cerdedo, Cotobade, Forcarei, Ponte Caldelas y Campo Lameiro) y destruyendo algo más de 8.000 hectáreas, es decir, tanto como lo que ardió en toda la provincia de Orense. También rebasaron las 500 hectáreas incendios registrados en los municipios de Avión, Mazaricos, Vilaboa, A Gudiña, Baiona, Laracha, Barro, Meis, Camariñas, Lousame, Porto do Son y Oia, por citar únicamente los más importantes de la lista de cuarenta. En cualquier caso, Suárez Canal lucía ayer un gesto más distentido en relación a los últimos días. Quizás por el tiempo meteorológico, que le daba motivos para ello con la llegada de las primeras lluvias. Según los datos de MeteoGalicia, ayer se registraron en doce horas precipitaciones intensas en la provincia de Pontevedra. En la estación de Lourizán-Pontevedra, se registraron 35 litros por metro cuadrado, mientras en Vilagarcía caían 16 litros y en Santiago de Compostela, un total de once.