Reclama acabar con la política penitenciaria como una cuestión de derechos humanos
Ibarretxe afirma que la Ley de Partidos y la dispersión obstaculizan la paz
El lendakari sostiene que su plan soberanista contiene las claves para el fin de la violencia
El lendakari Juan José Ibarretxe opinó ayer que el mantenimiento de la Ley de Partidos que posibilitó la ilegalización de Batasuna y la dispersión de los presos de ETA constituyen los principales «obstáculos» a los que se enfrenta el proceso de paz. En una comparecencia pública en San Sebastián, Ibarretxe rescató su plan soberanista y apuntó que el proyecto contiene las claves para que los partidos vascos alcancen acuerdos sobre un nuevo marco jurídico y político que permita superar la violencia y resolver el denominado conflicto político vasco. Ibarretxe presidió esta mañana en San Sebastián la habitual reunión con la que el Gobierno vasco cierra el período estival y abre el curso político. En su comparecencia ante los medios de comunicación, el lendakari avanzó que «su misión» en los próximos meses será la de ser «agente activo por la paz» e «impulsar» el diálogo entre las diferentes fuerzas políticas a fin de poder constituir la mesa multipartita este otoño. Otra de sus tareas será estudiar una fórmula para que los ciudadanos vascos puedan participar de forma activa en el proceso «desde el comienzo hasta el final». El lendakari señaló a este respecto que la sociedad puede ser «el blindaje» necesario para que «no haya vuelta atrás» por intereses particulares de los diferentes partidos. Será el 22 de septiembre cuando la precise en el debate de política general que celebrará el Parlamento vasco. Desde la «serenidad», Ibarretxe se mostró convencido de que las dificultades que han existido o puedan existir en un futuro «se van a superar» y demandó para ello a los partidos vascos «valentía» para que abandonen disputas mediáticas y planteen «iniciativas» políticas, y «discreción» para que la discusión no se haga a través de los medios de comunicación. Dificultades El presidente autonómico no ocultó su preocupación por los «obstáculos» a los que se enfrenta el proceso de paz y mencionó entre ellos la Ley de Partidos y la política penitenciaria. Señaló que el fin de la dispersión de reclusos es una cuestión de «derechos humanos» que no debe mezclarse con el debate político ya que los presos no pueden ser utilizados como si se tratara de una «partida de ajedrez». «El acercamiento de los presos es algo que se debe de hacer al margen de un proceso de negociación política y sin ser mezclado con un proceso de normalización política», insistió. A pesar de las dificultades, el jefe del Ejecutivo vasco lanzó un mensaje optimista porque tras cinco meses de tregua «estamos mucho mejor» que hace un año. No obstante, opinó que el País Vasco tendrá que hacer «un transición de una cultura política de la confrontación a una nueva cultura política del entendimiento» y precisó que esa será una tarea « todos». Eso así, Ibarretxe defendió la plena vigencia de su plan soberanista, rechazado por el Pleno del Congreso y aprobado por el Parlamento vasco y apuntó que este texto de proyecto de nuevo estatuto contiene «los mimbres» que permitirán superar el denominado conflicto vasco. «El acercamiento de los presos es algo que se debe de hacer al margen de un proceso de negociación política» JUAN JOSÉ IBARRETXE Lendakari