Los chicos fueron detenidos y dejados posteriormente en libertad
Queda en coma por una paliza de sus hijos tras acuchillar a su mujer
Los jóvenes, de 25 y 17 años, alcanzaron a su padre en la calle al hallar a su madre en un charco de sangre
Dos operarios limpian la calle donde quedó tendido el presunto agresor
Un hombre de 59 años permanece en estado de coma en un hospital de Zaragoza tras ser golpeado por sus hijos, después de que éstos le sorprendieran intentando asesinar a su ex mujer con un cuchillo. El presunto agresor sufrió un traumatismo craneal severo a causa de la paliza, mientras que la mujer quedó herida leve con varios cortes en el cuello. Los hijos fueron detenidos por un delito de lesiones y dejados posteriormente en libertad. Enrique S. esperó a que su ex mujer, Catalina L., saliera de su casa en el popular barrio de San José para consumar su particular venganza. Hacía seis años que estaban separados y sobre él pesaba una orden de alejamiento después de haberle roto la nariz hacía unos meses. Eran las 6.45 de la mañana del lunes. Catalina iba a trabajar cuando Enrique, escondido en la puerta del portal, se abalanzó sobre ella y le agredió con un cuchillo de cocina, provocándole pequeños cortes en un lateral del cuello que no impidió que sangrase a borbotones. Asustada, Catalina gritó pidiendo auxilio, lo que alertó a sus hijos que en esos momentos se encontraban durmiendo. Mientras, Enrique había comenzando su huida. Persecución Los jóvenes de 25 y 17 años bajaron en pijama rápidamente y tras ver a su madre tendida, aturdida y con abundante sangre en su ropa pensaron en lo peor. Su padre lo había conseguido. Había consumado la venganza. Llenos de ira, salieron en su búsqueda hasta alcanzarlo 30 metros más adelante. Las patadas y los puñetazos se sucedieron entre insultos. Una contundente paliza que dejó a Enrique inconsciente, con un fuerte traumatismo, aunque la policía trabaja sobre la hipótesis de que pudo haberse producido a causa de una caída como consecuencia de los golpes. El agresor fue internado en la UCI del hospital Miguel Servet de Zaragoza, cercano al barrio de San José. La mujer, que se encuentra fuera de peligro, prestó declaración en las dependencia policiales, mientras que los hijos fueron detenidos por un delito de lesiones. Ahora será el juez el que determine si lo hicieron en legítima defensa.