Diario de León

Los grupos respaldan en el Congreso la investigación de la policía, la Justicia y el Parlamento

Todos los partidos rechazan la teoría de la conspiración del PP sobre el 11-M

El juicio puede empezar en febrero y la sentencia será dictada en el otoño del 2007

Jesús Caldera (i) y Eduardo Zaplana (d) conversan al término del pleno del Congreso celebrado ayer

Jesús Caldera (i) y Eduardo Zaplana (d) conversan al término del pleno del Congreso celebrado ayer

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M. Iglesias / Julio Á. Fariñas - madrid / redacción
León

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El pleno del Congreso rechazó la propuesta del PP para exigir informes detallados del Ministerio del Interior sobre los explosivos utilizados en los atentados del 11-M y las supuestas contradicciones apreciadas en el transcurso de las declaraciones y pruebas relacionados con la masacre. El resto de las fuerzas políticas del Parlamento -socialistas, nacionalistas de CIU, ERC y PNV, Izquierda Unida, Coalición Canaria y Grupo Mixto- unieron sus votos para defender una propuesta alternativa de plena confianza en las investigaciones judicial, policial y parlamentaria frente a las dudas expresadas por el primer partido de la oposición. La negativa del PP a admitir el texto de la mayoría impidió su votación. El partido opositor pretendía que el Congreso instara al Gobierno a que, en el plazo de una semana, remitiera a la Cámara un informe científico sobre los restos recogidos en los lugares donde explotaron los trenes en Madrid para determinar el tipo de explosivo utilizado por los terroristas. Además, reclamaba también información detallada de otros datos relacionados con el material explosivo, la mochila de Vallecas, la furgoneta Renault Kangoo, el Skoda Fabia, etc. Pedía explicaciones al titular de la cartera del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, sobre «las contradicciones entre las declaraciones de altos cargos» del Ministerio y «los hechos posteriormente demostrados». En su defecto, la iniciativa proponía la comparecencia de los mencionados altos cargos en sede parlamentaria. Además, se proponía la reclamación del «resultado de la investigación prometida» por el anterior ministro del Interior, José Antonio Alonso, sobre los confidentes de la policía. El calendario del 11-M La Audiencia nacional tiene previsto fijar para el próximo mes de febrero la vista oral del juicio por la masacre del 11-M y dictar la sentencia entre octubre y noviembre del año próximo, con tiempo suficiente para evitar que alguno de los 21 procesados encarcelados salga de prisión al agotar los cuatro años de prisión preventiva, que es el máximo permitido. Para que ese calendario se cumpla, la vista de los recursos contra el auto de procesamiento deberá concluir el viernes. Antes de finales de mes la sala hará pública su resolución. A primeros de mes se cerrará la instrucción y unos 20 días más tarde se drá traslado a la fiscal que formulará el escrito de acusación a mediados de octubre. Las fuentes consultadas indicaron que la Sala de lo Penal prevé que el macroproceso más importante d ela historia judicial de este país se celebre en el pabellón de alta seguridad de la Casa de Campo, donde en la actualidad se celebra el juicio contra las organizaciones del entorno de ETA. La sala calcula que las sesiones se prolongarán durante cuatro o cinco meses, en sesiones de mañana y tarde, los lunes, martes y miércoles, para quedar el juicio visto para sentencia entre junio y julio. El peso de la acusación lo llevarán cuatro fiscales, de los cuales dos estarán siempre en la sala y en los principales interrogatorios, así como los informes se encargará personalmente el fiscal jefe. El salón de vistas se tendrá que reformar para acoger a los 29 acusados y a más de 50 abogados, la mitad acusadores y la mitad defensores, además de al tribunal, los fiscales y abogado del Estado. Entre las casi 25 acusaciones particulares estarán las tres asociaciones de víctimas del 11-M.

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