Los vecinos de Arcade piden en la calle la absolución de Ana María Ríos

Los familiares de Ana María Ríos, la recién casada gallega encarcelada en Cancún al encontrársele en un bolsillo exterior de su maleta varias balas y un extraño detonador, mantenían en alza sus esperanzas de verla libre, después del careo que mantuvo este viernes con dos funcionarios de la aduana del aeropuerto mexicano. En menos de 48 horas se dictará sentencia, que todos esperan absolutoria, y que permitiría a la joven regresar a su casa el lunes o el martes. Entre tanto, los habitantes de la parroquia de Arcade, donde Ana María reside y regenta una peluquería, se concentraron este sábado en la plaza de la Ostra para exigir la liberación de su convecina, convocados por el Ayuntamiento y los comerciantes locales. Tras la concentración, los asistentes se reunieron frente al establecimiento de la recién casa, donde expresaron su solidaridad con las familias tanto de ella como de su marido. En el ambiente se respiraba también indignación por todo lo sucedido a una de sus vecinas, que vio como su viaje de luna de miel se transformaba en una pesadilla que dura ya una semana. Optimismo Las noticias llegadas a los familiares del marido, Marcos Dasilva, vecinos de la parroquia de Cesantes, en el vecino ayuntamiento pontevedrés de Redondela, facilitan el optimismo, ya que los abogados que defienden a Ana María aseguran que el juez ha considerado su versión, frente a las contradicciones que en el careo mostraron los dos agentes de aduanas mejicanos.