El 4% de la basura que genera Europa son ya aparatos electrónicos

Según estadísticas difundidas a través de Internet, la masiva proliferación de equipos electrónicos en las oficinas ha tenido lugar sin que se desarrollasen, al mismo ritmo, estrategias de actuación sobre los residuos que se generan cuando estos aparatos se quedan anticuados o llegan a ser simple chatarra. Según la organización norteamericana Silicon Valley Toxic Coalition, el paraíso californiano de Bill Gates, en el año 2.004 y sólo en Estados Unidos había más de 315 millones de ordenadores en desuso. En Europa el 4% de la basura generada la forman los residuos eléctricos y electrónicos. En España se generan cada año entre 100.000 y 160.000 toneladas, sólo en el ámbito doméstico, a los que, si se añaden los residuos del sector de la electrónica, la industria y los establecimientos comerciales, se alcanzan fácilmente las 200.000 toneladas. El problema se agrava con la limitada vida útil de la llamada línea gris (equipos informáticos, teclados y teléfonos móvles), ya sea por haber sido diseñados con ese objetivo o porque los avances tecnológicos exigen sustituirlos de forma más o menos periódica. Los montones de basura, en todo caso, van en aumento y amenazan con dispararse de forma exponencial, como el número de usuarios.