Exceso de celo
LLUÍS Corominas está en prisión por matar a un presunto ladrón de una banda -evito el adjetivo albano-kosovar por los prejuicios que conlleva-, pillada con las manos en la masa. No pesa sobre él una sentencia. Es presunto inocente. La investigación sigue. La jueza dirá si actuó en defensa propia o si hizo su trabajo como jefe de seguridad con exceso de celo, igual que ella.