La policía busca rastros de ADN del otro desaparecido para poder certificar su muerte
Hallan el cuerpo de uno de los dos ecuatorianos aplastado en su coche
Zapatero visita a las familias de las víctimas y les promete que se hará justicia Perfil:
Los equipos de rescate locali-zaron ayer, cinco días después del atentado, el cuerpo sin vida de Carlos Alonso Palate, uno de los dos ecuatorianos desaparecidos tras la explosión de una furgoneta bomba en el módulo D del aparcamiento del aeropuerto de Barajas. En contra de lo previsto, el cuerpo de Palate se encontraba en el interior de su vehículo, un Renault Clio rojo aparcado en el nivel 0 del párking, sobre el que cayeron otras cuatro plantas. El coche se hallaba muy cerca de su posición original, la plaza 423, y no estaba calcinado. Tras ser reconocido y, debido a su grado de aplastamiento, fue necesario un soplete para acceder a su interior y recuperar los restos. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, prometió ayer a los familiares de las dos víctimas del atentado cometido por ETA el pasado sábado que «se hará justicia, toda la justicia por este atroz crimen». En declaraciones a los periodistas tras reunirse durante dos horas y media con los familiares de Carlos Alonso Palate y de Diego Armando Estacio, quien permanece aún desaparecido, Rodríguez Zapatero aseguró que quienes han cometido este crimen «responderán ante la justicia». Insistió en que «la barbarie del día 30 no sólo ha sido un acto criminal, sino perfectamente inútil para cualquier intento u objetivo de la banda terrorista ETA». Rodríguez Zapatero se interesó por los lugares de origen de los familiares de Palate y por el tipo de vida que llevaba el joven ecuatoriano en Valencia, la ciudad en la que residía, según indicaron fuentes de la Presidencia del Gobierno. El presidente del Gobierno tenía previsto visitar este jueves el lugar del atentado en la T-4 de Barajas. Las fuentes citadas aseguraron, sin embargo, que esta visita ha quedado «de momento» anulada y que no existe una nueva previsión. Sin rastro de Diego Estacio Los equipos de bomberos y policías consideran que será más difícil recuperar el cuerpo del otro desaparecido, el también ecuatoriano Diego Estacio, que según sus familiares también descansaba en el interior de su coche. Pero en este caso se encontraba aparcado en la cuarta planta, a escasos metros de la furgoneta bomba cargada con cientos de kilos de explosivo, lo que podría haber destruido completamente sus restos. La policía científica rastreaba ayer entre los escombros en busca de rastros de ADN que permitan certificar el fallecimiento de Estacio. Las razones que abonan este método se encuentran en los informes científicos que aseguran que en el interior del párking se registraron poco después de la explosión tem-peraturas superiores a los 1.000 grados centígrados, suficientes para calcinar por completo un cuerpo.