Un problema más que virtual
Algunas líneas del transporte a la demanda que operan en cabeceras de comarca cuentan con paneles en los que se informa puntualmente sobre las paradas del autobús y el tiempo de llegada o de retraso. Son una minoría, pero el bus sí controla vía teléfónica dónde y a cuántos viajeros tiene que recoger. Una pantalla de ordenador le indica el trayecto a seguir a través de pueblos semivacíos.