ETA mezcló explosivos para multiplicar en Barajas su efecto destructivo

ETA utilizó una mezcla de dos explosivos en el atentado de la terminal 4 del aeropuerto de Barajas. El Ministerio de Interior confirmó ayer que, tras analizar más de dos centenares de muestras de los restos del atentado, la Policía ha llegado a la conclusión de que la base de la bomba era un explosivo inorgánico, del tipo amonal o amosal. Además de este explosivo, la banda terrorista utilizó otra sustancia de naturaleza hexógena, que sirve para multiplicar el efecto detonante y que ya ha utilizado anteriormente en diversas ocasiones desde 1994. El departamento que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba aprovechó el anuncio para hacer un balance de la actuación de las Fuerzas de Seguridad en los catorce días transcurridos desde el atentado terrorista que puso fin a la tregua de la banda criminal. Trabajo intensivo en Barajas Unos 50 agentes, la mayoría de ellos encuadrados en la Policía Científica y los Tedax (desactivación de explosivos), trabajan las 24 horas del día en el lugar de la deflagración. Ya han inspeccionado los restos de 559 vehículos, unos 35 al día, que se han ido colocando en el aparcamiento de los empleados de Aena. También han recogido 200 muestras, entre piezas metálicas y restos de tierras. Interior subrayó que el primer objetivo de los agentes fue localizar e identificar a los dos ecuatorianos que murieron en el atentado. Buscaron entre los restos de la explosión cualquier indicio de restos humanos, al tiempo que tomaron muestras de ADN de los familiares de los fallecidos por si eran necesarias para identificarlos. El Ministerio destacó que el rescate de Diego Armando Estacio fue «sumamente laborioso» y apuntó que fue necesario utilizar una cámara para identificarlo antes de sacar sus restos del vehículo.